MORDIDO POR ERROR♣ Yoontae♣

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Se sentía intimidada y muy asustada ante la imponencia y autoridad que emanaban los guardaespaldas de Taehyung. La forma intimidante en que observaban cada uno de sus movimientos era más de lo que pudiera soportar.

— ¿Estás bien? Luces pálida Ji–Eun.—  La pregunta de Taehyung fue baja, casi en susurro.

Pero mostraba preocupación en sus palabras.

— Y–yo.. para ser sincera me siento intimidada por tus guardaespaldas.— no podía negar aquello porque sinceramente a más de uno dentro de la cafetería se sentía igual o peor de lo que ella se sentía.

— Lo siento.. aunque me siento igual no puedo hacer que me dejen solo un momento.— El suspiro cansado de Taehyung mezclado con vergüenza y miedo era notorio.

Más notorio de lo que estaba ocultando.

— ¿Cómo te sientes? ¿Qué tal te fue en la cena? — cambió de tema sabiendo que de no hacerlo sería difícil para Taehyung y para ella seguir otro minuto más en ese lugar con la incómodidad de los guardaespaldas.

— No hubo cena, de último minuto cancelaron la reunión.. de hecho lo agradezco tanto.— el rostro pálido de Taehyung denotaba sus ojeras marcadas debajo de sus ojos, el tinte de su cabello poco a poco desapareciendo de sus cabellos castaños, sus mejillas rojas producto del frío. Dejando ver lo  cansado que se encontraba.

Lucía delgado apesar de estar embarazo.

— ¿Estás comiendo bien Taehyung? Te vez demasiado delgado para la etapa de embarazo en la que estás.— hizo hincapié a ello.

En el estado en que se encontraba Taehyung y el bebé no debería de estar pasando por nada de lo que acongoja su corazón.

— Creo que es el estrés.. porque como todo lo que me preparan.. — le miró sorber de su bebida dejando ver sus palidas manos salir del gran abrigo café que lo protege del frío.

— ¿Hay algo que te estrese? ¿Es por lo recién sucedido? — interroga con preocupación, de alguna manera Taehyung se volvió alguien importante para ella y le preocupaba verlo así.

Antes de que fueran amigos veía a Taehyung feliz y sonriente la mayoría del tiempo pero ahora solo llora o se mantiene triste cada vez que lo ve.

Cómo si el haberse casado fuera una de sus mayores pesadillas.

— Así es.. hay cosas que no se pueden asimilar de la noche a la mañana que me van consumiendo.. tengo miedo de no poder hacer todo aquello que me han impuesto a ser.. yo solo quiero vivir una vida tranquila y sin nada que tenga que ver con la empresa o con los problemas de la familia Min.. — La mirada aniquilante de uno de los guardaespaldas le hizo temblar de pies a cabeza, al notar que Taehyung estaba llorando.

Estaban en la mesa de a lado pero los sentía a un par de centímetros de ellos.

— ¿Quieres ir a otro lugar? ¿Algo diferente? — la confusión en el rostro de Taehyung fue notoria.

Su silencio le acompaño haciendo que dejara escapar las últimas lágrimas de sus ojos.

Pagó la cuenta con nerviosismo sabiendo que cada paso que dio fue registrado por los siete pares de ojos que la siguieron a cada momento.

Seguía siendo aún peor que cuando Taehyung paso por ella esa tarde, jamás se imagino que llegaría con guardaespaldas y chófer y que estos a su vez no dejarán un solo minuto a Taehyung solo, no podían hablar con confianza con ellos siguiendo sus pasos.

Salieron de la cafetería sabiendo que no solo ellos agradecieron irse de ahí; el local era pequeño y nada lujoso como los del centro de la ciudad, pasaba desapercibido y económico, agradable y cálido, por eso lo escogió sabiendo que a Taehyung le podría agradar el lugar y hablar con la libertad y tranquilidad que deseaba.