MORDIDO POR ERROR♣ Yoontae♣

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Taehyung se sentía fatal.

Lleno de culpa y decepción por sus propios actos y falta de control.

HyunSik era un alfa encantador, amable, cariñoso y muy responsable, al que le había roto el corazón, y no soportaba ese sentimiento en su ser.

HyunSik era su pretendiente, el alfa que poco a poco se fue ganado su corazón y del que estaba empezando a sentirse atraído por el, su omega no le hacía el feo y su lado humano lo consideraba alguien guapo, cariñoso y educado, un hombre perfecto con el que podría hacer su familia.

Pero ahora, eso se había ido a la basura.

Desde que llegó a la universidad, esa mañana, las cosas le habían salido mal, sus compañeros de clases se arremolinaron sobre él con preguntas de su desaparición por días completos, haciéndolo sentir invadido, solo y desamparado ante los cuestionamientos de todos.

Sus amigos le habían insistido en averiguar como fue su primera vez, quién era el afortunado y si lo conocían y la pregunta más dolorosa de escuchar fue la de ¿Fue HyunSik? Había negado con la cabeza agachada y los ojos llorosos recordando que había sido malo y un desvergüenzado por dejar que aquello ocurriera, pero ni siquiera pudo negarse a ello, no recordaba nada de lo ocurrido esa noche.

Cuándo creyó que no podía sentirse más mal, se encontró con HyunSik en el pasillo, la sonrisa enorme que le regalo desde la distancia lo dejó helado y lleno de culpa, haciéndolo sentir se una mala persona y muy culpable.

La sonrisa bonita y cálida del alfa se apagó al instante en que había llegado a su lado, recuerda ver sorpresa en su mirada, después desilusión y terminar con una pizca de enojo, pero HyunSik no le reprochó ni lo tachó de ser alguien fácil o jugador con los alfas.
Aunque el rostro de HyunSik se lleno con muchas interrogantes de las que no tenía respuesta a ninguna –no por el momento –.

Trató de explicar su situación pero el alfa le negó el privilegio de explicarse, felicitándolo y disculpándose con él con la escusa de que tenía clase en esos momentos.

Cosa que no era verdad, sabía el horario del alfa, pero no dijo nada, dejó que se fuera y lo dejará con la culpa de haber roto su corazón, de haber ilusionado e ilusionarse con alguien como lo era HyunSik.

No quiso que nada de lo que paso pasará, sólo quería que todo fuera como antes, donde era libre como un ave y no presa de una marca que le traía dolor y tristeza por la falta de su pareja.

Esa mañana había regresado a la universidad con la intención de continuar con sus responsabilidades académicas y tratar, vanamente, de no pensar y necesitar a ese alfa, que no había vuelto a ver ni escuchar de el, nada.

Como si hubiese desaparecido de la faz de la tierra y se escondiera de él y de su familia, evitándolos como si no hubiese pasado nada.

Más ahora, que sus padres estaban muy preocupados y algo enojados por no saber nada del alfa que lo había marcado, no había ido a presentar sus respetos como correspondía y mucho menos como prometió su hermana que lo haría.

Ni una llamada, nada.

Y eso que ya eran varias semanas.

Y su omega se sentía cada vez más triste y deprimido por su ausencia.

Como si sólo lo hubiese usado y arrojado a la basura después de haber sido utilizado.

Lo comprendía, ninguno de los dos había querido aquello pero ya no había forma de remediarlo o siquiera mitigar lo un poco.

Tenía una marca en su cuello, la prueba de que ya era un omega enlazado. Había perdido su virginidad sin siquiera estar consciente de ello, sonó con que ese momento fuera especial y lleno de amor. Pero no obtuvo nada.