Otoño / Saida

12 - Dulces Dieciséis.

Finalmente era 28 de Mayo. Sana había estado toda la semana organizando la fiesta sorpresa de la menor junto a sus padres, ella sería la que se encargada de llevar a Dahyun a su casa cuando los invitados y todo estuviera listo.

Así que su plan era decirle a la coreana que saldrían a tomar algo por su cumpleaños, por lo que ni bien salieron del colegio fue tras ella, recorrió los pasillos casi corriendo hasta llegar al estacionamiento, dónde Dahyun estaba contra su auto sonriendo nerviosa sin mostrar los dientes con las mejillas sonrojadas, ya que frente a ella estaba acercándose Eunwoo, con flores y chocolates por su cumpleaños, giró los ojos y suspiró, no iba a dejar que sus celos arruinen la sorpresa. Se acercó rápidamente confiada y tomó a la menor de la cintura, levantándola en el aire haciéndola reír.

—¡Sana-unnie! Para, ¡Bájame!, mi falda. —el corazón de la japonesa latió rápidamente al escuchar su risa y la bajó sonriendo ampliamente.

—¡Feliz cumpleaños Dahyunie!. —Saludó. —Tienes 16 ¿Puedes creerlo?. —Preguntó eufórica, Dahyun asintió feliz, el día no podía estar mejorando para ella. Sana sintió la presencia del chico a su lado y carraspeó.—Oh, lo siento Eunwoo. —Se disculpó Sana cuando vio al chico aún con las flores y los chocolates, había interrumpido la escena con toda la intención del mundo pero se sintió un poco mal al verlo opacado a un lado, ya que Dahyun parecía más feliz por ver a Sana que por las flores que él traía.

—No.. está bien. —Musitó tímido. —Felices 16, tofu. —Exclamó entregando las flores y los chocolates. Intento acercarse a abrazarla y Sana lo interrumpió tomando a Dahyun de la cintura moviendola un centímetro lejos de él de manera inconsciente deteniendolo, la japonesa volvió a hablar.

—Tú y yo, ésta tarde saldremos a tomar algo ¿Okay? . —Dijo mirando a la coreana que la escuchaba atentamente.

—Oh, yo pensé que saldrías conmigo. —Habló Eunwoo, comenzando a molestarle la presencia de Sana. La castaña lo miró con una ceja levantada y trató de mantener la calma recordando que él ahora es el novio o lo que sea de Dahyun, y que por ella, debería ser más amable con él.

—Yo... si, Sana.. iba a salir con él. —Respondió apenada la menor, Sana río irónica sin disimular en lo más mínimo y negó con la cabeza, no iban a arruinar su fiesta sorpresa con una tontería romántica.

—Okay. —Exclamó retirándose, Dahyun sintió miedo de que Sana se enojara, pero intentó retenerse a si misma para no ir corriendo tras ella. —Nos vemos, Dahyunie.

La japonesa se alejó lo suficiente y verificó que nadie estuviera cerca para tomar su teléfono, marcando el número de Chaeyoung.

—¿Sana?. —Preguntó confundida la coreana del otro lado, si bien tenía buena relación con Sana, ella nunca la llamaba.

—Necesito que invites a Eunwoo ésta noche a la fiesta sorpresa de Dahyun, sino arruinara todo nuestro plan. —Exclamó sin más. —Le dije a Dahyun que saldríamos a tomar algo, pero ella dijo que ya tiene planes con él.

—Okay, está bien. —Respondió la menor. —Hablaré con él.

Más tarde, la japonesa terminaba de arreglar con sus padres la sorpresa mientras la coreana no estaba ahí, cuando recibió una llamada de Dahyun.

—Dahyunie. —Habló mientras terminaba de acomodar los globos en la pared, los últimos de la fiesta y le hizo una seña con el pulgar en alto a la madre de la joven, quién sonrió ampliamente al ver lo hermoso que quedó todo decorado.

—¿Dónde estás?. —Preguntó la menor, ella se encontraba en el auto con Eunwoo, quién acababa de cancelarle los planes.. en su cumpleaños.