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Ese día fui a terminar de preparar algunas cosas después de la universidad con Brian, me faltaba solo una carrera para poder estar a nivel de los corredores mas potentes de la calle, el hecho de que el 154 no estuviera corriendo eso me facilitaba las cosas y lo estaba aprovechando con cada segundo.

Cuando llegamos fui de inmediato al taller había algunos ruidos que no me gustaban en el auto.

-Sabes ese lugar en la dirección no me gusta nada, le cambie todo y sigue, creo que vamos a tenerlo que llevar a escanear-
-No tenemos tiempo-
-No te voy a dejar correr si el auto no esta bien, esa es mi condición, y si querés matarte, hazlo solo no con algo que toque, estas son mis reglas sino te vas-

Vi que Brian hablaba muy serio y si bien quería correr no quería perder mi vida en eso.

-Sabes cuando volverá- lo dije mirando la mole negra que estaba cubierta con un cobertor negro
-creo que la semana próxima, sus padres son un tanto intensos y tiene que dejarlos contentos para que no sospechen-
-Es una pena que este ahí, es como una bestia que pide ser liberada-
-Esa bestia no es tuya, y déjala en paz-
-Oye tienes algo con ella, te gusta, por que estas muy intenso con el tema-
-No, solo que vos te pesado con el tema, ella es como mi hermana, no seas idiota Spencer. Si te gusta ve y díselo, pero no te pongas como niño malcriado-
-Como me va a gustar si no la conozco, solo me intriga, no la vi nunca y difícil será de una persona que este siempre con un casco cuando te habla-

Si me intrigaba, pero solo en eso, aun pensaba y me estremecía al pensar en Mia, y después de que papa la bio cuando volvió a la ciudad aún más, la sentía cerca, pero no sabía por dónde empezar a buscarla, yo no tenía redes y por ende como la localizaría, no recordaba el lugar incluso creo que nunca se lo había preguntado, pensaba que se había ido de viaje y volvería en algún momento.

Entrada la tarde mi hermano llego al taller, lo habían acercado los padres de Sofia, había regresado del viaje de estudio, no sabía porque había venido para aquí en ve de ir a casa, pero si bien por fuera éramos totalmente diferente, por dentro éramos prácticamente iguales.

-Hey chicos cómo están? -
-Hey hermano que cuentas como fue el viaje? -
-Estupendo, pero tengo una noticia que no podía esperar-
-Perdiste tu virginidad? - dijo riendo Brian
-Que gracioso-
-Dale cuenta-
-El día que llegamos nos reunieron a todos en el hall del hotel donde nos íbamos a hospedar y empezaron a nombrar ca da uno a sus alumnos, hasta que escuche un MIA MONTEZ-

Mi cara al escuchar ese nombre se tensó, y comencé a prestarle más atención a los que inicialmente pensé que era una pavada.

-Que?
-Si cuando escuche ese nombre me acerque al grupo y ahí estaba, la misma Mia frente a mis ojos-
-Y te vio?-
-Claro que si al principio nos costo reconocernos ella esta muy cambiada, pero cuando me dijo pecas me abrazo y ahí note que de eso nada había cambiado-
-Y Como esta, donde esta?-
-Esta increíble hermano, no sabes en el mujeron que se convirtió, es una pista de carreras de todas las curvas que tiene-
-Hey no te pases-
-Bueno vos me preguntaste, y yo te respondí, tanto imagínate que cuando Sofia me vio abrazarla vino al humo después se calmó cuando le dije su nombre-
-No lo puedo creer todos la vieron y yo no-
-Es que creo que cuando la veas te vas a desmayar de verdad hermano esta hermosa, color de pelo diferente, facciones diferentes y bueno ya no es una niña-

No podía creer, se me había acelerado el corazón con lo que me decía mi hermano, hacia 4 malditos años que no la veía, pero se me segua acelerando el corazón con solo escuchar su nombre. Pero cuando seria mi momento, cuando me volvería a cruzar con ella, como seria, me saludaría, se quedaría quieta, como seria, siempre soñaba con eso, tenia 20 años yo ya no era una adolescente, pero ella me ponía con todo a la defensiva y eso me encantaba pero a la vez me angustiaba, seria posible que un amor de adolescentes durara o era solo por el hecho de que no la tenía.

-Quedamos en que uno de estos días vendrá a casa a cenar, ah me mando muchos besos para ti-
-Apa parece que la llama sigue ardiendo- dijo Brian
-Porque no se callan ambos-
-Ahora si que cuando se vuelvan a juntar seguro las chicas serán mas fuertes-
-Sabes vamos a casa por que los dos se ponen intensos con el tema-

De camino a casa el crio se la paso hablando del viaje, pero aun mas de que le había pasado algo que no pensó que pasaría, había conocido a otra chica que le había gustado de tan solo verla, la verdad que yo mucho no podía hablar de relaciones ya que la única novia que había tenido había sido Mia y nunca me gusto otra chica mas que ella, pero como hermano mayor le aconseje que se fijara quizás había sido solo ese momento y que si vea que le pasaba algo con otra chica debía ser sincero, pero que no engañara a nadie por que no estaba bueno jugar con los sentimientos de los demás.

Espero me haya entendido pero las hormonas son hormonas y mientras que no me haga tío y se cuide el resto se podía ir viendo.

Papa estaba en casa, sin quererlo me di cuenta que ya era hora de la cena, le conto todo Ryan mientras yo cocinaba, otra vez volvió Mia a la conversación y mi estomago se revolvió, dios no podía creer el efecto en mi que tenia esa niña, y pensaba que tan linda se había puesto, para mi era la chica mas hermosa que podía haber conocido, de solo imaginarme que habría hecho lo mismo que yo, me daba odio, seguramente, pero odiaba que alguien mas la hubiera besado o tocado, me enfermaba pensarlo, por eso decidí distraerme en otra cosa y no pensar mas.

CORREDOR  154Donde viven las historias. Descúbrelo ahora