CORREDOR 154

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Carrera tras carrera el auto de Mia era implacable, nadie podía ganarle.

Una noche luego de la carrera Mía cobró su parte y como siempre la mitad se la daba a Noah quien ya se había dado por vencido de discutir eso con ella, era una guerra que ya definitivamente estaba perdida.

-Hey preciosa hoy no puedo llevarte es el cumpleaños de papá y todos haremos una videollamada para saludarlo-
-Claro no te preocupes, tranquilo termino acá y le digo a Connor que me lleve-

No, se fue si yo me quedé terminando de acomodar algunas cosas y de pronto una voz familiar vino detrás

- hola - la voz de Dalton

Me di vuelta sintiendo un escalofrío que me recorría todo el cuerpo era una extraña sensación, no podía bien de escribirlo

- hola- le dije

- solo quería aprovechar no quería asustarte quería  pedirte perdón por todo, sé que estuve como un idiota, y qué cosas que no sentía nunca en mi vida pensaría que fuiste mis obras, que eres una de las mejores personas que conocí y todo esto me hace entender que no era nuestro momento-

Las disculpas de Dalton parecían ser sinceras, era como si estuviera hablando con alguien diferente con alguien que había pensado analizado cada palabra que estaba diciendo, y que tenía sentido y emoción lo que decía.

-Gracias significa mucho para mi y disculpa yo asumo la verdad que me toca. Pero sabes que te quiero a pesar de todo un montón y que creo que tampoco fueron hasta el momento que las cosas sucedieron demasiado rápido y creo que no era nuestro momento-

-Lo sé, sabes estoy haciendo terapia, no solo por esto sino por mucho más y me está ayudando un montón, ahora haremos un viaje con papá en las vacaciones a visitar familia y creo que de a poco todo se va a acomodar o por lo menos eso creo-

-Estoy muy feliz por vos y espero que a la vuelta nos sentemos Y conversemos de todo lo que nos pasó de lo bueno y de lo malo-

-Claro que sí a la vuelta te prometo que nos sentaremos a tomar un helado y hablaremos mucho, y voy a preparar mi auto si le voy a ganar a esa cosa monstruosa que tienes- reímos

Mía y Dalton se abrazaron fuerte, con sentimiento, apenas en ese momento Noah vio  la situación, se había vuelto porque se había olvidado algo, lo que vio no le gustó absolutamente nada algo dentro de él se enfureció, pero nunca solo se dio media vuelta y se fue.

Noah
Al entrar y verlos abrazados mi corazón se rompió en pedazos, Mia y yo no teníamos nada, eso ya lo sabía pero últimamente nos habíamos acercado un poco más.

En el camino a casa decidí que ya no me afectaría, ya me habían destruido mucho a lo largo de mi vida y este no sería otro tatuaje más, tenía solo que limitarnos a lo que era, yo el preparador de su auto y ella mi compañera de colegio, poner esa distancia que ella había pedido en un momento, pronto llegarían las vacaciones y también sería un buen momento para que todo esto se empezará a dilatar, ella me gustaba de verdad, pero no viviría a las sombras de Dalton Spencer.

Mia
El domingo no tuve noticias de Noah, lo llamé e incluso le mandé varios mensajes, pero nada no me contestaba ni siquiera estaban como leídos mis mensajes, Mila me dijo que había salido temprano y que mencionó que iba a volver tarde.

Si bien me preocupé también me di cuenta de que yo no era nadie para reprocharle ni decirle nada, pero sí lo extrañaba, me sentía bien con él incluso habíamos estado hablando con Mila de las vacaciones.

Ellos tenían una casa en la playa por lo que se le había ocurrido que podríamos ir todos creo que era una gran oportunidad para unirnos aún más como grupo, se había fortalecido mucho nuestra amistad con la llegada de ellos y como las vacaciones solo estaban a una semana era una idea genial.