My boy crush | Jenlisa

18; Dieciocho

A la mañana siguiente de la fiesta, Jennie despertó con un dolor de cabeza intenso. Nunca fue una buena bebedora, lo descubrió cuando Jisoo la llevó a una fiesta con varios de sus amigos de San Francisco. Ahora se arrepentía como todo el tiempo de beber.

Alguien en la cocina tiró una taza por idiota, y sabe que es Jisoo cuando grita:

—¡Esto ya está sobre el piso!, ¡Solo fue una noche!

Jennie se dió vuelta sobre la cama, dando en la suavidad de las sábanas, con un intenso olor a menta sobre ellas, Jennie no recordaba que la cama de Jisoo oliera tan bien, siempre olía a frutas y sudor, porque Jisoo se ponía pijamas calientes cuando hacía calor porque eso le hacía sentir cómoda. Su excusa era esa.

Pero luego también recordó que Jisoo tiene una compañera...

—¡Mierda! —Gritó. Pensó que Lisa estaría sobre el piso, o el sofá, no podía quedarse ahí, siempre era un poco considerada con Jennie, aunque al principio hubiera sido más fría que el helado, ahora era una chica menos helada que antes.

—¿Qué coño pasa, Jennie?— Jisoo se acercó a ella agarrando el lado derecho de la esquina de su cabeza, antes de llegar al cuero cabelludo.

—¿Has visto a Lisa?

—¿Lisa?, ¿para qué la quieres aquí?, ella no está en ningún lado, desde que desperté la busqué pero no está.

—Uf. Que susto.

—Oye. ¿cuándo llegamos aquí, imbécil?

—¿Por qué me dices 'imbécil'? —Comentó Jennie ofendida.

—¿Alguna vez has seguido mis consejos?

—¡No tiene nada que ver!

—Me haces enojar. Joder. Kim Jisoo no se deja humillar, hora de levantarse.

—Zack jugará el miércoles, dice que tiene un nuevo trato en otro equipo, tengo práctica ese día, y el no querrá venir. —Interrumpió a Jisoo.

—¿Puedes cortarlo?

—No. Es sólo un rato juntos, creo que sí le digo que venga, vendrá.

—¿Sabes?, no te pregunté eso.

—Lo sé, pero no voy a cortarle porque no va a mis prácticas. Él estaba en el mismo lugar solo que en la práctica de los jugadores

—Oh... No me importa. —Dijo Jisoo desinteresada.

Jennie río con las ocurrencias de Jisoo, a ella nunca le caían bien las parejas de Jennie, decía que solo la persona indicada le caería bien, porque creía fielmente que Zack era un chico gay de clóset. Pero a Jennie no parecía convencerle la teoría.

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El miércoles fue un día pesado, Lisa terminó con un tirón en su hombro por culpa de Momo, cuando corrió y estiró demás su mano para el hombro de Lisa, golpearla y caer sobre ella.

Lisa llevaba la bolsa sobre su hombro, dirigiéndose a la habitación de Rosé, había dicho que tenían unas bolsas de frituras y juegos, había invitado a las chicas y pos suerte era un día con poca tarea para Lisa.

En el campo ya no había nadie, más que algunos chicos esparcidos alrededor, algunos porristas hablaban del otro lado. Lisa se concentraba en salir de ahí. Hasta que topó con un cuerpo frente a ella.

—¿Jennie?

—¿Lisa?, ¿irás al departamento con Jisoo?