Capitulo 37

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En una habitación oscura, con la única ventana tapada por periódicos y una cama oxidada que sonaba cada vez que intentaba dormir... se encontraba Maddy Jelinsky/Addams.

No recordaba como pasó, pero lo que recordaba era que una noche un hombre llegó a la puerta de su casa donde su madre lo mando al "diablo" y cerró. Luego se fue a dormir y al despertar por un ruido ella fue tomada de su casa sin más.

Luego de eso estuvo en un auto por tal vez unas horas y después llegaron a esa casa abandonada.

Después vio como ese hombre le presentaba a un chico, Tayler y que era un buen amigo para mi.

El chico al verme se sorprendió mucho y le pidió explicaciones de porque estaba una pequeña con ellos.

Pi como discutían un poco y luego me llevaron al cuarto donde... apestaba a moho.

No sabía cuánto tiempo paso hasta que volvió a ver a ese chico con cabello ondulado.

- hey... - oyo decir. - te traje comida... por si... tienes hambre y... personalmente te hice chocolate - termino diciendo mientras se lo dejaba en la cama donde la niña se encontraba.

- gracias - aún cuando sabía que no debía confiarse, sintió de alguna forma que el realmente era amable, solo que tal vez las circunstancias estaban en su contra.

- de que... emm - y hizo un ademán para saber como llamarla.

- Maddy - dice bajito la niña, pues solo tiene 6 años.

- Maddy, soy Tayler y te juro que no te are daño... - lo dijo sinceramente.

Había algo en Tayler que cambió a tener a esa niña en presencia. Era diferente que cuando estaba con Wednesday, Lauren o hasta el mismo Vladimir... pues con todos siento un sentimiento de querer matar, destrozar o hasta de comerse.

Si Lauren era su ama, pero al principio tenía el sentimiento de terror a su verdadero ser, pero una vez que empezó a acostumbrarse dejó eso de lado y fue fiel a ella.

Luego está Wednesday, que con ella sintió el odio contra los excluidos y como Lauren se quería deshacer de ellos por completo.

Después estaba ese loco de Vladimir que le ponía los pelos de punta, era esas ganas de estar lejos y también de matarlo y dejarlo en trozos.

Pero con esa niña, tenía la sensación que no quería que nada le pasara, era como verla como una hermanita y eso le hizo sentir raro y tranquilo.

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Paso un par de horas mientras esos Vladimir y el otro se iban a buscar a el otro tipo que comandaba un grupo de lobos para su objetivo, que por preocupación se fue a ver a la niña.

Cuando entro al pequeño cuarto vio que estaba susurrando algo en voz baja, pero se detuvo cuando oyó que entraba alguien.

Al verlo a él sus ojitos se iluminan de una manera que Tayler le vibra su pecho de una manera diferente.

Oscuro y Rosado - WenclairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora