6. Quidditch y Hogsmeade

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El día del partido de quidditch de Gryffindor contra Hufflepuff realmente no lo viví, pedí permiso para quedarme en el castillo; no me dejaron, pero gracias al universo un día antes me había bajado y bueno, me inventé la excusa de que estaba indispuesta para quedarme  organizando el almacén de pociones de la enfermería sola. Esa mujer tiene cerca de cinco frascos grandes de cada una de las pociones curativas, para cuando estaba a mitad de camino Poppy llegó corriendo desde el campo de quidditch con una camilla rodeada de chicos en uniformes rojos, así que cómo buena chismosa salí del almacén y pregunté si necesitaba algo, sintiendo la mirada de todos los chicos en la sala ir hacía mí.

—No querida, esperaremos a que despierte para poder revisarlo —me dijo sonriendo con amabilidad—. ¿Cómo vas con ese almacén?

—A la mitad, no sé si guste que les de privacidad y terminar mañana, supongo que el partido terminó

—Estás en lo correcto, y no te preocupes linda, puedes continuar yo estaré en el despacho —sonrió y se fue al mencionado dejándome ahí sintiéndome incómoda con las miradas

Cuando estaba por irme Fred se acercó a mí hasta rodearme por los hombros haciéndome separar por inercia al tener el uniforme mojado.

—Cuidado idiota, por eso no salí. Para no enfermarme —dije alejándome de él haciéndolo reír pero tomar mi mano

—Ven te quiero presentar al equipo, Hermione y Ron, murciélago

—¿Tu hermano es el que está en la camilla? —pregunté preocupada

—No, es Harry, pero Ron vino con nosotros

—Oh… pero… no quiero incomodar, lo conoceré después —dije incómoda tratando de volver en mis pasos

—Es un buen momento, vamos quiero que conozcan a mi futura esposa—me guiñó el ojo haciéndome reír

—No soy tu futura esposa. Tienes chicas que conquistar ¿no recuerdas?

—No importa eso ahora. Quiero que te conozca.

—Bien —bufé resignada dejándome arrastrar

Pude ver a Harry desplomado en la camilla con la respiración tranquila, Ron y Hermione tenían cara de preocupación, el resto del equipo que eran las cazadoras se veían angustiadas pero no tanto cómo los amigos directos de Harry.

—Chicos, la mujer de mis sueños —me presentó Fred y yo solo saludé con la mano—, Alba Snape. ¿A qué no es una linda murciélago?

—¿Ella es el murciélago del que te quejas por…?

—Ron… cállate —dijo tensando la mandíbula haciendo al pelirrojo callar

—¿Ahora de qué te quejas sobre mí, Fred? —pregunté molesta— Si te molesta algo de lo que digo o hago sólo tienes que decírmelo para dejar de hacerlo

Fred sólo se sonrojo y sonrió nervioso rascando su nuca.

—Un gusto, Alicia Spinett —se presentó rápidamente con una sonrisa amplía —. Hicimos un trabajo juntas de defensa en segundo año

—Te recuerdo, me gusta tu estilo en los pases libres —dije sonriéndole

—Angelina Jonhson —se limitó a decir mirándome con recelo

—Un gusto, eres muy buena como cazadora, siempre haces un movimiento a la derecha que me gusta mucho. Seguro serás capitana el próximo año—halage

—¿Me observas? —dijo disgustada y cambiando su posición a una defensiva

Ya no me gustaba mucho esa realidad. Angelina fue mi amiga y mi novia en otras realidades mientras que en está parecía odiarme; y yo la amo mucho en otras realidades pero si quería tratarme mal yo no iba a dejarme.

𝑼𝒏 𝑨𝒎𝒐𝒓... ¿𝑶 𝒅𝒐𝒔? • 3ra RD Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora