La casa de las cartas ~Minsung~

Final

Jisung terminaba de ayudar a Chan con sus cosas, le ponía cinta a las cajas mientras esperaba a que volviera de hablar con sus padres.

Felix y Changbin habían pasado los siguientes días juntos, Felix se tenía que mudar pronto al centro deportivo así que aprovechaban todo el tiempo que tenían para estar juntos. Habían arreglado que se verían todos los fines de semana, incluso si solo era para ayudar a Changbin con trabajos y tareas.

Seungmin y Jeongin estaban igual de inseparables, el menor se le había pegado como chicle y lo seguía para todas partes -no era nada nuevo-. Igualmente habían arreglado todo, su solución fue videollamadas todos los días para poder verse y fines de semana largos, Jeongin iría a Seúl a verlo.

Eso solo dejaba a Minho y a Jisung, quienes no habían hablado bien las cosas, las vacaciones se estaban terminando, ya no le quedaba tiempo.

—Preguntan mis padres si te quedas a cenar— volteó a ver a su amigo, negó con la cabeza—. ¿Qué tienes?

—Nada, solo pienso. Ya se va a acabar el verano, voy a volver a Seúl.

—Como todos los años, Jisung. ¿Por qué piensas que está vez es diferente?

Porque lo es

Se encogió de hombros y se levantó dejando la caja a un lado.

—¿Volverás en el verano?— preguntó.

Chan hizo una mueca que intentó ocultar al instante, empezó a jugar nerviosamente con las mangas de su sudadera.

—De eso te quería hablar.

No tú también, no te vayas también.

—No creo volver a Corea el próximo año, para ser sincero, no creo volver a Corea en muchos, muchos años.

—¿Por qué?

—Es Corea, Jisung. No quiero ser un esclavo del sistema de este país, no me gusta. Es lindo aquí, pero quiero ser alguien más en otro lugar.

Era todo, primero Hyunjin, luego Chan. Ni siquiera podía enojarse con ellos por querer irse del país, simplemente tenían razón.

—Vamos, te acompaño a tu casa.

Aceptó con una sonrisa triste.

Si le dijeran a su yo de 7 años que estaba aguantando sus lágrimas porque su amigo se iba a ir para posiblemente no regresar, iba a llorar porque ¿Cómo te atreves a mentirle a un niño diciéndole que tiene amigos?

Fue a mitad de camino que la lluvia los atacó, tuvieron que correr para evitar mojarse de más.

Mientras corría en la lluvia dejó que las lágrimas se deslizaran por sus mejillas, extendió sus brazos y se dejó bañar por la lluvia.

Nada dura para siempre. Me hubiera gustado que esté verano nunca se hubiera terminado.

Ahora solo era una llovizna la que mojaba las ciudad, fue cuando llegaron a la casa de Jisung, la última vez que se iban a ver en posiblemente esa vida, pero se iban a volver a encontrar, tenían que volver a encontrarse.

Él enfrente de la puerta sin querer abrirla y entrar, porque sabía que cuando lo hiciera, iba a terminar todo.

Chan había estado con él incluso cuando pensó que estaba solo, ahora iba a volver a estar solo, al igual que Chan. Ambos iban a estar solos.

—Supongo que todo termina aquí— dijo balanceándose en sus zapatos húmedos.

—No lo veas así, míralo más como un nuevo capitulo en nuestras vidas, las historias siguen.