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-Rin apresúrate! Se nos hace tarde!- Gritó las más pequeña mientras subía la pequeña colina.
Estando en la cima ella se dejó caer en el césped, mientras que el chico permaneció de pie con la mirada fija en la puesta de sol.
-Te dije que era increíble.
-Y yo te dije que no quería venir- reclamó el castaño. -Por cierto, no me llames Rin, no me gusta.
En ese momento a ninguno le importó las palabras del otro. Ambos disfrutaron de ver al sol esconderse.
-¿Crees que el Sol se vaya a dormir ahora?
-No seas tonta ____. Es el planeta tierra el que rota.
La pequeña siempre se preguntó la base del comportamiento de su amigo. Ese trato era común entre ambos pero aveces le llegaba a herir el corazón.
-¿Por que me tratas así?- preguntó sin apartar la vista del hermoso paisaje.
-Eres hija de la mejor amiga de mi madre..
-Rin.. ¿Somos amigos?
-No me llames así-murmuró sin saber que responder a la pregunta.
Sin previo aviso ____ se levantó y sacudió su vestido para quitar la hierva, junto a la tierra que se le había pegado.
-Nunca fuimos amigos ¿Verdad?
-No.. bueno, no lo se. Siempre vienes a casa junto a tu madre y estoy obligado a jugar contigo. Ni si quiera quería venir aquí.- sostuvo.
-¿Y por qué viniste?
-Por qué o si no iba a ser regañado ¿Qué no entiendes? No quiero ser tu amigo ____ pero debo serlo porque nuestras madres quieren eso.
Algo se había quebrado en el interior de la pequeña y le dolía tanto que no pudo retener el llanto por más que lo quiso.
-N-no- negué -No quiero ser tu amiga.
-____... lo siento yo..
-No Suna, no quiero ser amiga de alguien que no quiere ser mi amigo.
Limpio sus mejillas con brusquedad y se fue, dejando al castaño en la cima de la colina completamente solo.
[...]
____:
-¿Están listos?
-¡Si!- gritaron al unísono.
Reí por la emoción de todos. Era agradable verlos así antes del partido.
-Gracias por venir hoy ____. En estos momentos es donde se necesita mucha ayuda- dijo el profesor Takeda.
-Hinata se veía muy nervioso.. eso es común?- lo mire con preocupación.
-Si pero ¿Podrías verlo? Debe estar en baño y necesito que estén todos aquí.
Asentí con mi cabeza -Iré por él.
Una pequeña sonrisa se me escapó al sentir un poco de ternura por el comportamiento del peli-naranja. Entraba y salía del baño con frecuencia y no me quedaba de otra que esperarlo aunque de todos modos lo iba apresurando.
Al no recibir respuesta me apoye contra la pared, a un costado de la puerta y deje ir un suspiro de frustración.
Seguramente Shimizu lo estaría haciendo mejor que yo. Pensé.
