Karlyle se inclinó hacia adelante, al sentir como si su cuerpo se partiera por la mitad. Ash tiró de Karlyle, quien estaba tratando de escapar sin darse cuenta. Le sujetó la cintura con las manos y echó su cuerpo hacia atrás. Las nalgas empapadas de lubricante y la ingle de Ash chocaron entre sí.
Puck, se escuchó un ruido fuerte.
El pene de Ash se clavó en la estrecha cavidad interior. Su pene atravesó la pared interna pegajosa y caliente. Karlyle arqueó la cintura. Con solo las caderas levantadas, Karlyle frotó la cara contra las sábanas. El dolor fue fugaz. Poco a poco comenzó a sentir un placer hormigueante desde su agujero, que estaba abierto hasta el límite.
—Ah, ah, Ugh...ah...¡Ugh!
Karlyle no podía respirar. Un suspiro se escapó de su boca abierta. La saliva que no pudo contener fluyó por sus labios. Ash se movía sin darle tiempo para lidiar con su apariencia desordenada.
—Ah, sí, ah, ah, Ash, sí, es grande, ah, Ugh.
Era la segunda vez que recibía el pene de Ash, pero todavía no sabía como respirar. Ash sostuvo su pecho desde atrás, mientras Karlyle luchaba por recobrar el aliento.
Los dedos de Ash le tocaron los pezones. Ash le retorció los apretados pezones. El placer se extendió bruscamente y una señal vino desde abajo. El pene de Karlyle se levantó y su agujero se apretó sin darse cuenta.
—Shhh, eso fue increíble.
—Ah, Ugh, Ash, ah. Ugh.
Cada vez que Ash le retorcía y le pellizcaba los pezones, el torso de Karlyle temblaba. El cuerpo debajo de Ash se estremecía sin saber qué hacer. Parecía que estaba ansioso. Mientras estimulaba su pecho, Ash comenzó a moverse lentamente. Su pubis estaba firmemente adherido mientras giraba la cintura.
Sus sentidos estaban muy claros. Su pene se agitó a través de su estrecho interior. El glande redondo y duro se frotó contra la pared interior, mientras el pilar sólido lo rozaba por todas partes. Un placer escalofriante se deslizó por su columna vertebral.
Karlyle apretó los dedos de los pies con fuerza. Sus ojos se abrieron de par en par. Entonces sacudió la cabeza y soltó un sollozo bestial. Apenas pudo contener las lágrimas, pero no había nada que pudiera hacer para detener el sonido que se filtraba por sus labios.
—Ugh, ah, sí, sí, ah, ugh, si, Ash, ¡Ah, ah, ah!
Ash conocía el cuerpo de Karlyle mejor que él mismo. El pene, que volvió a encontrar fácilmente la próstata, presionó lentamente el área a su alrededor. Se necesitaba un mayor estímulo.
Karlyle sintió que se estaba volviendo loco, ante el placer de sentir el vello púbico de Ash rozando sus nalgas. Luchando con la emoción, Karlyle rezó. —Desearía que lo hicieras más fuerte. Sin pensar en nada...—.
—¡Hazlo, más duro, ah, ugh!
Ante eso, Ash detuvo el movimiento de su cintura. Los músculos del pecho de Ash, que se habían calentado a una temperatura corporal similar a la de Karlyle, se pegaron a su espalda. Su espalda estaba resbaladiza por el sudor. Era tan bueno que incluso sentía como sus pieles se frotaban.
—De verdad...—le susurró Ash, con una voz profundamente arraigada a su oído. Las feromonas de Ash se filtraron lentamente debajo de su piel. Las feromonas, que habían estado fluyendo levemente, pronto invadieron a Karlyle como un tsunami. Su cuerpo se estremeció.
—Me estás volviendo loco—dijo Ash, mientras se movía de manera diferente. El pene, que había salido dejando solo la punta, se volvió a incrustar de inmediato. La boca de Karlyle se abrió de par en par. Puck, puck, los sonidos aumentaron su intensidad gradualmente.
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Define La Relación
RomanceNacido como Alfa de una familia noble, pero no dominante, Karlyle se siente estresado por tener que tener una relación con un omega que es obligatoria y recibe asesoramiento. El consejero anima a Karlyle a tener relaciones sexuales con un alfa para...