Karlyle abrió los ojos sintiendo un hambre tremenda. Pudo ver un techo blanco. Las sombras de las cortinas proyectadas débilmente en el techo, se llenaron de luz solar y luego desaparecieron. El sonido de una urraca se escuchó a lo lejos.
Karlyle parpadeó en silencio. Aparte del hecho de que tenía mucha hambre, se sintió renovado. Durmió tanto que sintió que se había despertado, porque ya no podía dormir más. Lentamente, sus sentidos regresaron. Y lo primero que notó, fue el olor de unos sabrosos panqueques.
—¿Estás despierto? —escuchó una voz cariñosa, y una mano se posó en su nuca. Sintió que la mano frotaba suavemente sus músculos. Karlyle ladeó levemente la cabeza. Y entonces, vio a Ash.
—...Ash.
Ash vestía una camisa blanca y pantalones negros holgados. Su cabello estaba cuidadosamente recortado, y su piel lucía suave. Su rostro sonrosado se veía muy bien. Karlyle le miró la cara, y se dio cuenta que el rut de Ash había terminado.
Por fin.
Karlyle suspiró aliviado, ya que incluso se había sentido un poco asustado. Ash inclinó la cabeza. Sus labios tocaron su frente. Y con los brazos abiertos de par en par, Karlyle abrazó a Ash.
—...¿Terminó tu rut?
—Jajaja...
Ash sonrió con torpeza. La mano que tenía en la espalda de Karlyle lo abrazó con fuerza, y luego lo soltó. El olor a comida se había sumado a ese momento. Olía a panqueques con mantequilla, frutas ácidas y carne madura. Sintiéndose muy hambriento, Karlyle se levantó. Ash colocó una bandeja en los muslos de Karlyle.
—¿Tienes hambre?
—... Me da vergüenza reconocerlo, pero sí.
—No...es comprensible—dijo Ash débilmente. Karlyle frunció un poco el ceño ante el tono triste de su voz.
—¿Estás bien, Ash?
—¿Estás bien, Lyle?
En primer lugar, su cuerpo estaba mucho mejor que antes. No sabía cuando tiempo había dormido, pero Karlyle sentía que su resistencia había regresado hasta cierto punto. Pero obviamente, su trasero estaba en muy mal estado. Le dolía mucho la espalda. Le dolían los muslos y también el agujero.
—No creo...que pueda hacerlo hoy.
Así que Karlyle dejó a un lado su orgullo y dijo la verdad. Pensó que moriría si lo hacía una vez más. Tenía que descansar al menos un día.
—Maldición. Lo siento.
Ash levantó una mano y cerró los ojos, cubriendo solo la mitad de su rostro. Pudo ver la culpa desbordarse en su expresión.
—¿Comemos primero?
—Sí.
Karlyle no se negó. Ash extendió la mano para tomar el tenedor y lo sujetó suavemente. Luego, tomó un cuchillo y un tenedor, y comenzó a cortar los panqueques.
Los panqueques esponjosos eran muy gruesos. Junto a los panqueques bañados en almíbar, había huevos revueltos, arándanos, tocino y salchichas.
Ash cortó los panqueques primero y se los ofreció. Karlyle vaciló. Pero tenía mucha hambre. Entonces abrió la boca. El tenedor se extendió. Lo tragó de inmediato. Los panqueques se derritieron en su lengua. Como si fueran miel.
Una vez que probó la comida, el hambre lo invadió sin control. Y cuando miró a Ash con un poco de urgencia, él sonrió. Esta vez, cortó la salchicha. Karlyle abrió la boca. Y Ash le dio de comer de nuevo. Luego, siguieron los huevos revueltos. Y después los arándanos empapados en almíbar de frambuesa.
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Define La Relación
RomanceNacido como Alfa de una familia noble, pero no dominante, Karlyle se siente estresado por tener que tener una relación con un omega que es obligatoria y recibe asesoramiento. El consejero anima a Karlyle a tener relaciones sexuales con un alfa para...