08

406 31 1
                                    

08| what do you mean?

digamos que sunoo nunca fue alguien cuyo ego llegaba hasta el cielo, sin embargo tenía sus preferias por creer que medio mundo moría por él siendo esto completamente correcto, pues sabía cuándo alguien si estaba interesado en él o simplemente estaba cerca para obtener otra cosa aparte de su simple presencia. así que era casi imposible estar cerca de él por su inteligencia.

pero entonces llegó un chico terciario a su vida a volverle un caos con su propia existencia; alguien con bastante eficiencia teniendo así el valor de ser mil veces mas inteligente que el menor nombrado anteriormente, así que, ¿qué tan malo podría llegar a ser esto?

las probabilidades de encontrarte con uno de tus profesores del colegio eran casi nulos, invisibles como una rienda amarrada en la total oscuridad de un bosque, pero, casi posibles para personas con mala suerte; o sea, kim seonwoo. por supuesto, el chico con el mayor récord de hacer de su vida un desastre al encontrarse siempre con la persona que le cae mal. ¿quién había empezado aquel ritual maligno? él, y solo él. comenzado desde pequeño.
pero, pensándolo bien sunoo nunca tuvo del todo de acuerdo en ir a una reunión de su hermana, aun sabiendo cuáles eran las posibilidades de que él estuviese ahí. desde el jueves que no lo veía y hoy era sábado, lo cual, ciertamente no le vendría para nada bien ir hasta aquel departamento encerrado con miles de personas que no conocía; exepto Suna, Sunghoon y Jake, quien curiosamente le había caído sensacional. pero ese no era el tema de hoy; ¿podría llegar sano y salvo a su casa sin siquiera cruzar una sola palabra con aquel mayor? ya lo veremos.

termino de ponerse la remera crema y tomo su celular mirándose una última vez en el espejo, arreglando y desarreglando su pobre cabello, el cual no tenía la culpa de haber sido tan impulsivo, hizo una mueca bajando de prisa al escuchar las quejas de su hermana, al bajar la observó acostada en el sillon con una pierna en el porta brazo del sillón y con el otro en el suelo, medio cuerpo en el sillón y el otro medio simplemente preexistia ahí mismo, tan femenina como siempre, aunque debía de admitir que adoraba la forma en que se vestía.

—Oh, ¿ya estás listo?

pregunto percatandose de su existencia luego de dos largos minutos mirando sus uñas desarreglandas, hizo su cabello hacía atrás y tomo su pequeña mochila junto con las llaves de su auto y salieron de casa para irse.

—¿A dónde iremos?

pregunto sunoo poniéndose el cinturón mientras miraba de reojo como su hermana se retocaba la tonta de labios, lo miro de reojo y simplemente suspiro pesado reacomodando el pequeño espejo, prendió el auto y entonces hablo:

—Iremos a la casa de Jake. Lo recuerdas, ¿no? — sunoo asintió y miro hacía el frente—. No a dejado de preguntar por ti.

—¿En serio?

—Ujum. Le caiste bien. De hecho, no lo se pero..

y dejo de hablar solo para insultar a alguien que se pasó, sunoo solo la miro, siempre hacia lo mismo.

el tiempo pasaba y la tarde se iba junto con ellos, con el pasar, por lo menos, veinte minutos, Suna aparcó fuera de una casa realmente grande, estaba puesta en medio de un lugar privado así que supuso que era rico.

demonios Suna, ¿a dónde te has metido?

podía jurar que incluso todos sus amigos había nacido con cuchara de oro desde pequeños.

tomo su celular y siguió a Suna, quien caminando con sus manos dentro de sus pantalones y masticaba chiles, sunoo solo iba con dos bolsas de ramyeon, soju y otras bebidas mas. odiaba ser hermano menor.

𝙔𝙤𝙪𝙧 𝙙𝙖𝙢𝙣 𝙥𝙪𝙥𝙥𝙚𝙩. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora