𝙔𝙤𝙪𝙧 𝙙𝙖𝙢𝙣 𝙥𝙪𝙥𝙥𝙚𝙩.

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15| Where u belong.

Seonwoo no solía disfrutar de los fines de semana en su casa, por lo que mayormente los pasaba con su hermana, quien con poca gracia lo recibía con mucho gusto y muchas caras de disgusto por la visita de su hermano menor, por supuesto que está tampoco fue la excepción.

se encontraba caminado hasta su recidencia, fuera de estás habían demasiadas personas, mil veces mayores que él porque pues era obvio, ¿no? porque era una residencial de universitários. hizo su cabello hacia atrás y entro al ascensor pidiendo el último piso y, rápidamente se encaminó hasta la habitación de su hermana, tocó la puerta y una Suna bastante desalineada le dio la bienvenida, fastidiosa rodó los ojos haciéndose a un lado y caminado hasta el baño nuevamente para escupir la pasta de dientes, sunoo se sacó sus converse y se sentó en el sillón.

—¿Mamá te corrió?

—No.

—¿No está en casa?

—Si.

—¿Te reto por algo?

—No.

—¿Estás escapando de hacer tareas?

—No.

—¿Entonces?

—¿Entonces qué?

—¿Qué demonios haces aquí?

—¡Hey! ¿No puedo visitar a mi única hermana?

—No.

hizo un puchero y puso una cara de obviedad, observaba como está estaba buscando ropa de su armario, la veía estresada.

—¿Qué buscas?

—Mi pantalón sastrero.

—¿Cuál de todos?

Si, Suna tenía una pequeña obsesión con aquellos pantalones, los tenían en todos los tonos y formas.

—El negro clásico.

—Esta ahí.

señaló uno que colgaba del gran televisor y lo saco, se tambaleó por toda la casa tratando de ponerse el pantalón y sunoo simplemente hizo una mueca de asco.

—Tienes que dejar de andar por ahí en tu casa sin pantalones, y además, no deberías de abrir la puerta así.

—¿Y qué? La remera me llega hasta abajo de los muslos, nadie imaginaria que ando sin pantalones cortos. Además, es mi casa, Sunoo.

se puso de espaldas y se sacó la remera bruscamente, miro por encima de su hombro como Seonwoo simplemente le regañaba con la mirada, batallo con el cierre del corpiño hasta que lo logro, se puso una remera corta totalmente blanca y se peino un poco.

—¿A dónde demonios te vas? ¡Acabo de llegar!

—Tengo que juntarme con Jake, tenemos un trabajo grupal que entregar el próximo semestre. Nadie te dijo que vengas.