𝙔𝙤𝙪𝙧 𝙙𝙖𝙢𝙣 𝙥𝙪𝙥𝙥𝙚𝙩.

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32| smell like teen spirit.

sus ojos sobre el castaño, sus manos expresivas sin poder dejarlas quietas mientras hablaba, sus labios curvandose de vez en cuando a las insinuaciones que decían sus compañeros, sus músculos tensandose bajo aquella remera de hilo que llevaba puesta de un color chocolate oscuro, sus fuertes pectorales viéndose tan deseados bajo aquella tela que tenia ganas de...

—¿Por qué lo miras así? — apareció Jungwon frente a su campo de vista—. No me digas que..

—¿Qué? No. ¡No! ¡Jungwon, por favor!

pudo sentir como sus mejillas se habían calentando rápidamente mientras que la carcajada de yang lo llegó a tardar mucho y retumbar bajo las cuatro paredes de ese salón.

—¡Pero si no he dicho nada! — se defendió sentándose de vuelta, de brazos cruzados lo tomo de las rodillas y lo giró para verlo directo a los ojos—. ¿Qué andabas pensado?

—Nada. ¿Tendría que haber pensado algo?

—Ay por favor, Sunoo. Podría decirte que conozco hasta que nalga tienes mas grande, pero lamentablemente tu trasero es tan simétrico que me da celos. A lo que iba; conozco esa mirada.

—¿Pero de qué mirada me hablas, demonios? Yo solo estaba prestando atención.

le señalo el pizarrón y luego al profesor.

esté lo miro con una cara de pocos amigos.

—Vamooos, yo sé que te estás enamorando de él. Y no te culpo, es tan sexy que hasta podría dejar a mi novio por él.

—No me gustan los hombres, Jungwon.

¿entonces por qué te dejaste hacer todo eso por Sunghoon?

le reprochó su subconciente.

—Ya, pero digo; si en algún momento hipotético, te llegará a gustar, no tendré problemas en aceptarte.

—¿Te estás escuchando, acaso? Es nuestro profesor por si no recuerdas, Jungwon. ¿Una relación entre alumno y profesor? Por favor, no sería algo justo. ¿No?

¿Y entonces por qué estás haciendo todo lo que te parece incorrecto?

—¿Qué tiene? Quizá si..

—¿Quieren compartir con la clase sobre lo que están hablando, Yang y Kim?

les interrumpió Park, apareciendo así de la nada.

—No.

—Si.

Kim le miro con una de cara donde podía ver claramente un gran signo de interrogación.

—¿Por qué dices que sí?

le pregunto con un tono bajo mirando a Park frente suyo todavía.

—No lo sé. Lo he visto en películas y quería decirlo. — susurró para ellos mismos, pero igualmente Sunghoon los escucho—. No tenemos nada que decir a la clase, profesor. Nos disculpamos.