Amar A Escondidas (Countryhumans - Perú x Todos?)

✧•Capítulo 25: Tomando Control•✧

♥️:

Canadá, junto al country con máscara de cuervo se dirigían al baño, durante el camino, el norteamericano empezó a pedirle ayuda al país contrario, pues ya no sabía que hacer.

- Sé que cometí un error al acostarme con Kasajistán en nuestra cama, pero juro que no estaba consciente, había tomado de más por una pequeña celebración, no pensé que se saldría de control, ahora Perú no quiere que me acerque a él porque piensa que lo único que quiero es tener sexo una última vez.

- Se escucha tan jodido que no me interesa.

- ¡Lo sé! Es tan jodido, quiero decir, una de las razones por las que estaba con él era porque era muy bueno en la cama, su cuerpo era perfecto, pero también lo amaba, y... lo sigo amando; con tantas cosas que pasaron ya no sé si alejarme o persistir, incluso si USA dice ya no quererlo, sé que está mintiendo, quiere engañarse haciéndose creer que su único interés es México y las demás mierdas de países con los que se acuesta.

- ¿Y me cuentas todo esto porque...?

- Porque ya no tengo más opciones.

- ¡¿Disculpa?! Hey, no tendré sexo contigo, eres un asqueroso pervertido.

- No esa clase de opciones, subnormal, con tu cuerpo sería difícil que te la metiera, además, no eres precisamente mi tipo, me gustan amargados, pero no a tu extremo.

De repente, cuando ambos países estaban llegando al baño, escucharon ruidos extraños al otro lado de la puerta, los dos se miraron confundidos, suponían lo que podía causar ese sonido, ya que eso siempre sucedía en todas las fiestas, pero, no saber quiénes lo provocaba aumentó su curiosidad... al menos en el norteamericano.

Canadá colocó su mano en la manija de la puerta, intentó abrirla, sin embargo, estaba con seguro. Su curiosidad creció, empezando a tocar con cierta brusquedad, esperando a que alguien le respondiera, porque sí, en el fondo, era igual o más metiche que USA.

Por su parte, Israel y Perú se alertaron cuando escucharon los golpes. El israelí estaba angustiado, entrando casi en pánico; si lo descubrían en esa situación, sería el fin de su prestigio como "country histórico", sin embargo, a medida que los segundos pasaban, los pensamientos del israelí se dejaban llevar por la lujuria, desapareciendo en abismos y telas de puro placer, fue entonces, que se le ocurrió una idea algo traviesa, sonriendo maliciosamente.

- Perú~ ¿qué tanto te excita la idea de ser visto en esta posición? Recuerdo tu deseo por ser el centro de una orgía~ - desató la corbata de las muñecas del latino, girándolo y chocando su pecho contra la espalda del mayor; bajó sus manos de su cintura hasta su trasero, cargándolo y abriéndole las piernas bruscamente, direccionándolo a la puerta. - ¿Estás listo para darles una buena vista, perra mojada~?

- E-espera, Israel, esto no, no lo hagas.

- Muy tarde~ - el blanquiazul colocó su mano en la manija de la puerta, excitándose profundamente al ver la cara de vergüenza que invadía al sudamericano. - Luces tan bien ahora mismo~ - giró la manija lentamente, poniéndose cada vez más duro al sentir los temblores del cuerpo del mayor.

- Israel, basta, te lo pido.

- ...Si ruegas, a lo mejor nos salve a ambos. ¿Y bien? Vamos Perú, suplica como una perra que proteja esa culo y tu poca dignidad.

- ... - el andino se mordía el labio inferior con brusquedad, maldiciendo al asiático por su drástico cambio de comportamiento, no obstante, sabía que su plan no fallaría está vez, por lo que mantuvo la calma, y con sus ojitos color sangre comenzando a ponerse vidriosos, empezó a tartamudear, jadeando levemente, como si en cualquier segundo se rompiera en llantos - I-Israel... por favor, no quiero que otros me vean así, no dejes que me vean así, te lo suplico, no me humilles más, no quiero esto, no quiero que otros me vean... solo te quiero a ti...