Amar A Escondidas (Countryhumans - Perú x Todos?)

🦋⃟𓏲๋࣭࣪˖𝆺𝅥 Capítulo 30_Country de tres caras🦋⃟𓏲๋࣭࣪˖𝆺𝅥

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Zapatos negros, pulidos a la perfección, reflejando la profunda luz carmesí; pantalón azul, tan oscuro como la noche, cafarena blanca como la nieve, tan fresca y limpia, su bufanda negra de patrones misteriosos y exóticos, un abrigo blanco, con solapa y cuello negros, contrastando en una perfecta armonía con los opuestos, los costados de la cintura azul oscuro, vislumbrando elegancia y atrevimiento, poseyendo los mismos patrones de la bufanda; las mangas con el dobladillo afilado, dejando ver el destello azul, y, finalmente, brazaletes gruesos de plata que brillan adornando sus muñecas.

El elegante sujeto se mantiene erguido, con figura refinada pero atractiva, de postura cautivante; era tan difícil de definir, su presencia llamaba, siendo tan sublime. Y, ese cabello celeste claro, casi blanco; el tipo era una belleza en gris, de contrastes planificados, era él, sin duda. OTAN.

Sus ojos platinados recorrían la habitación, observaba a los countrys bailar, con la creciente excitación tomando lugar como niebla en un bosque; era desagradable, la falta de orden, la falta de diplomacia, no toleraría ese tipo de emociones en su presencia.

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La organización de la paz observó como se marchaba, dejándolo atrás.

En serio odiaba que alguien como él lo tratara así, minimizándolo frente a cualquier country que tuvieran delante, incluso frente a los más inferiores e inútiles. Casualmente, solo lo minimizaba a él, sin embargo, OTAN era alguien bastante meticuloso cuando se trataba de actuar en situaciones como estas, situaciones que atentaban a desequilibrar el sistema y status que tanto les había costado torcer, junto al poder de las potencias que debían prevalecer.

Siempre por encima de otros, ¿no?

A regañadientes, ONU se levantó del suelo, reconociendo cierta envidia por el control que presentaba OTAN con sus emociones.

Por otro lado. Callao finalmente había logrado perderse entre la multitud hasta estar cerca del escenario, llegando hasta Junín, quién seguía inmerso en tocar la guitarra.

— Hey, perra.

— ¡!

En su instinto de defensa, el departamento no piensa y ataca, usa una de sus piernas para darle una patada al "country enemigo", el ángulo perfecto para destrozarle la cara, sin embargo, antes del impacto, el repentino agarre del chalaco lo frena, su mano sujetando su muslo, elevándolo por lo más alto hasta colocarlo sobre su hombro. Su cuerpo se presiona contra él, aprisionándolo contra una columna, provocando que la melodía de la guitarra se detenga fugazmente mientras ambos cuerpos se tensan.

— Ahora entiendo porqué a Lima le jode tanto tu carácter.

— Casi te parto la mandíbula. ¿Eres imbécil?

— Soy Callao, mucho gusto.

— Ugh, idiota, ya suéltame, harás que nos descubran.

— Bien, bien, aguafiestas. Aunque... debo admitir... estás bien rico, tienes unos muslos bastante carnosos y firmes, almacenas buena fuerza ahí, ¿eh? — riendo por lo bajo, se alejó unos pasos de él, soltando con cuidado su pierna, observando como Junín lo miraba fastidiado, acomodándose la ropa para seguir tocando. Rodó los ojos con burla, mientras se asomaba levemente por la cortina, viendo a todos los countrys enmascarados bailando con sus respectivas parejas al son de la melodía, casi pareciendo querer coger en ese mismo instante. — ¿Quién lo diría? Cajamarca debe de ser un gran maestro si te enseñó a controlar el cuerpo del resto con una simple melodía.