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Con la luz del amanecer entrando en la habitación, Peter se despertó y vio a Logan dormido a su lado. Al mirarlo tranquilo y vulnerable, algo cambió en la percepción de Peter. Ya no parecía tan amenazante.

En ese momento, las emociones de Peter se volvieron un torbellino. La idea de que Logan no era tan malo como pensaba comenzó a tomar forma en su mente. La habitación, que antes estaba llena de miedo, ahora parecía un lugar diferente, un espacio donde las cosas no eran tan simples.

Tomando una decisión impulsiva, Peter se aventuró a acariciar la mejilla de Logan. Fue un gesto sutil, pero cargado de significado. En ese toque, se desató una chispa de emoción que Peter no esperaba. La posibilidad de que sus sentimientos hacia Logan fueran más complejos de lo que pensaba se abrió paso en su corazón.

La mañana, antes llena de incertidumbre, se volvió un nuevo comienzo. Peter, mientras contemplaba a Logan dormir, se enfrentaba a la realidad de que quizás su relación con su secuestrador estaba tomando un giro inesperado.

Los ojos del Alfa se abrieron despacio, mientras se estiraba suavemente. Cuando su mirada se enfocó, pudo ver el angelical rostro de Peter. Sonrió al seguir notando la mano del Omega en su propia cara. Se atrevió a posar su mano en la de Peter, reteniéndola en su propia cara. Giró su cabeza y le dio un beso en la palma del Omega.

- Buenos días.- dijo Peter avergonzado.

El gesto de Logan lo dejó desconcertado. Un escalofrío de sorpresa y emoción recorrió la espina dorsal de Peter. Aquel gesto, tan inesperado como delicado, encendió un fuego de emociones en su pecho. Sentía la suavidad del beso en su piel, pero también experimentaba el cálido rubor del nerviosismo en sus mejillas.

- ¿Has dormido bien?- volvió a hablar Peter.

No entendía muy bien sus emociones, pero las acciones de Logan lo desconcertaban un poco. El Alfa se había acercado a él para enterrarse en su pecho. Rodeando su cintura en un abrazo. Peter se rio suavemente cuando el Alfa agitó su cabeza de lado a lado rozándose con el pecho del Omega.

- ¿Qué pasa Logan?

- No quiero que sea de día. Porque te vas a ir, así que voy a seguir durmiendo.

- Pero ya es de día.

- Si no lo veo, no es verdad. Buenas noches.

Peter se rio y le permitió al niño grande seguir abrazado a él un rato. De hecho, continuó acariciando su cabeza durante un tiempo. 

Para Peter, cada instante en aquel abrazo se volvía más profundo y significativo. La vergüenza inicial que acompañó su despertar con Logan empezaba a ceder ante la embriagadora sensación de ser sostenido, tanto física como emocionalmente. Aunque la incertidumbre seguía danzando en sus pensamientos, una nueva emoción, la aceptación, se abría paso.

En ese abrazo, Peter encontraba no solo consuelo sino también un eco suave de sus propios sentimientos crecientes hacia Logan. La tensión se desvanecía gradualmente, reemplazada por la curiosidad de explorar lo que este nuevo capítulo podría traer. Aunque la mañana aún estaba fresca y llena de misterio, en aquel abrazo, Peter se aventuraba a dar un paso hacia la posibilidad de que, tal vez, lo inesperado podría ser exactamente lo que necesitaba. Aunque con esto, ya contaba, lleva contando desde el momento en el que su libertad fue arrebatada.

No lo entendía, pero tampoco se sentía tan mal. Es cierto que sabía que ha tenido suerte, dos veces secuestrado y en las dos ha encontrado a sus Alfas. Si le ofrecieran volver a su vida cotidiana, estudiando lo que no quería, todo el ambiente lleno de peleas y un nulo amor de sus padres hacia él o quedarse con sus Alfas que lo trataban como un rey. Era obvio que elegiría la segunda opción. Solo pediría el poder estar con TODOS y más libertad. Aunque entendía que lo único que están haciendo ahora es "protegerle". 

- ¿Ya te has dormido?

- No...

Peter se rio, era obvio que no se iba a dormir. Obviamente, era una excusa. Los dos se dieron cuenta de la situación y no pudieron evitar reírse juntos.

- No me voy a ir Logan. Solo, déjame un poco de libertad. 

El contrario no hizo caso, solo apretó más fuerte su abrazo y escondió con mis fuerza su rostro en el cuerpo del chico. Algo que decepcionó a Peter, realmente pensaba que el Alfa le haría caso.

Logan se encontraba en un terreno desconocido, luchando con un sentimiento que nunca antes había experimentado. La vulnerabilidad lo asaltaba, y el temor a perder a Peter se manifestaba en el agarre más firme de sus brazos. Entre la confusión y la inquietud, Logan se aferraba a Peter como si su presencia fuera un ancla en un mar de emociones turbulentas. La lucha interna se reflejaba en sus ojos, donde la intensidad de sus sentimientos chocaba con la necesidad de comprender este nuevo y desconcertante territorio emocional.

Los dos tenían sentimientos muy diferentes y claros que entre si chocaban al no saber que hacer. La decepción de Peter y el miedo de Logan eran como dos torrentes de agua que enseguida se apaciguaron en cuando el Alfa comprendió que no podía hacer nada, no le podía exigir nada, no eran nada. Soltó su abrazo y dejó a Peter libre.

- Lo siento, no debí de haber hecho eso. Ya ha terminado la noche, puedes irte. 

- Oye no me eches así, me haces parecer una prostituta.

Logan le miró y una risa nasal muy suave se le escapó junto a una sonrisa en la cara. Se sentó en la cama y se rascó la cabeza.

- No quería hacer que te sintieras así. Solo decía que ya se cumplió la recompensa. ¿No?

 Peter le miró de vuelta y sonrió. Levantándose de la cama y rodeando la cama, llegó al lado de Logan.

- Muchas gracias por la noche.

- Pero si no hemos hecho nada.

- Por eso...

Peter volvió a sonreír. La fuerza de voluntad del Omega hizo que su propio instinto le ganara a la vergüenza y no pensó muy bien en los actos. La mirada de Logan seguía al chico y cuando vio que estaba a su lado, de pie se quedó confuso. Pero quedó en shock solo de ver y notar como las manos de Peter agarraron su rostro con extremada delicadeza y acercó su cabeza para juntar sus labios en un muy muy muy pero que muy suave roce. A eso no se le podía llamar beso, pero fue el detonante de una gran bola de emociones para los dos.

El roce se transformó en un pico, para Logan, muy poco duradero. Al instante Peter huyó de la habitación.

Logan quedó mirando en frente, a la puerta, por donde el chico había salido. Llevó sus manos a sus mejillas y las acarició. Notando como su cara estaba ardiendo de vergüenza. No entendía que había pasado. Seguía en Shock.

Estaba demasiado exaltado.


Mi Vida A Tus Pies ~ allxPeterParkerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora