𝐔𝐧𝐝𝐞𝐫 𝐭𝐡𝐞 𝐌𝐨𝐨𝐧𝐥𝐢𝐠𝐡𝐭 (𝙸𝚜𝚊𝚊𝚌 𝙶𝚊𝚛𝚌í𝚊)

xxɪɪɪ- ᴠᴇᴛᴇʀɪɴᴀʀɪᴀ ᴅᴇʟ ᴀɴ̃ᴏ

MADISON BROWN

-¡Katherine, Katherine!- gritaba mientras salía de mi habitación a toda prisa. Bajé las escaleras corriendo y llegué hasta la cocina casi resbalándome al girar las escaleras.

La mujer, cuando vio que llegaba corriendo, me miró con una sonrisa divertida. -¿Qué pasa?

Agité el periódico en mis manos, cogiendo algo de aire por la rápida carrera que había realizado.

-Mira- cogí una bocanada de aire.

Abrí el periódico por la página en la que salía su foto con el titular de: Katherine Walter será nombrada mejor veterinaria del año.

La mujer cogió el periódico y negó.

-¿Cómo lo han puesto ahí?- se quejó.

-Es maravilloso- le quité el periódico de las manos y lo puse en el frigorífico, sujetándose por un imán. -Mira que bien queda.

-Eso no es para ponerlo ahí.

-Claro que sí- insistí y cogí mi taza de café. -Es un gran logro Katherine.

Nathan apareció por la cocina y me acerqué a él, abrazándole fuertemente. había venido del hospital hacía unos días, y aunque no le gustase la idea de tener que tomar pastillas hasta a saber cuando, siempre había ido con una sonrisa desde ese día.

-Eh mamá, que bien sales- señaló el frigorífico.

La pelirroja le sonrió y le dio un beso en la frente a modo de agradecimiento.

-Buenos días- los hermanos García entraron por la cocina.

Lee se estaba frotando los ojos, dando a entender que se había levantado y únicamente vestido, por lo que aún seguía dormido. Y su hermano se colocaba el pelo, como de costumbre.

-Acordaros de que mañana es la gala- George entró a la cocina con una sonrisa.

Todos asintieron, dando a entender que se acordaban perfectamente de que la gala por el reconocimiento de Katherine sería mañana.

Yo, que estaba apoyada en la encimera, con la taza de café entre las manos y casi tumbada. Sentí un peso encima mío, y cuando giré la cabeza vi media cara de Lee, que estaba con los ojos cerrados y suspirando pesadamente.

-Es hora de desayunar bella durmiente- le dije intentando que abriera los ojos, pero no obtuve respuesta.

-No quiero ir a clase- murmuró él, aún con los ojos cerrados.

Isaac, que pasaba por el otro lado de la mesa, me miró y me dedicó una sonrisa antes de coger un par de platos y ponerlos frente a mí.

-Buenos días- susurró, antes de rodear la mesa para acercarse al frutero y colocar un beso en mi cabeza.

-Buenos días- levanté la cabeza para mirarle y le sonreí.

Me levanté de la encimera, haciendo que Lee se tambalease, ya que se había dejado de apoyar en mí.

-Para la próxima duerme más- le sugerí mientras dejaba la taza en el fregadero.

-Intenta tú dormir con Isaac.

-Yo encantado.

Di un golpe suave en la cabeza de Isaac, haciendo que se callara, ya que su tía se había quedado algo aterrorizada.

-Sabéis que no podéis dormir con chicas, ni si son de esta casa- comentó George.

-Ya hemos dormido juntos.

Abrí los ojos como platos, al igual que todos los que estaban en la cocina, a excepción de Isaac, que estaba cogiendo unas tostadas, como sino hubiera dicho nada.

-¿Cómo?

-No es lo que piensas- me giré hacia Katherine, negando con la cabeza. -Fue el día de la hoguera, cuando...- las palabras quedaron en el aire cuando recordé ese día.

La mujer asintió. -Que sea la última vez.

Yo asentí levemente y miré a Isaac, haciéndole una seña para que hiciera lo mismo.

-Ahora iros, vamos- la mujer nos echó de la cocina como a gallinas fuera de un corral.

Cogí mi mochila y me despedí del matrimonio, antes de abrir la puerta y salir.

-Espérame- me llamó Isaac y luego pasó su brazo por mis hombros.

-¿Cómo se te ocurre decir eso a tu tía?- le giré la cara con un dedo, haciendo que mirara hacia el lado contrario.

-Venga, te ama como a su hija, no te iba a decir nada- se acercó para darme un beso pero giré la cara. -Oye- se quejó.

-No- negué con la cabeza. -Deja de decir comentarios fuera de lugar primero.

-Venga Maddie, era una broma.

-Pues lo mío no.

-Por favor- suplicó.

Agarré su cara con una mano y le di un beso en la mejilla.

-Suficiente.