𝐔𝐧𝐝𝐞𝐫 𝐭𝐡𝐞 𝐌𝐨𝐨𝐧𝐥𝐢𝐠𝐡𝐭 (𝙸𝚜𝚊𝚊𝚌 𝙶𝚊𝚛𝚌í𝚊)

xxɪɪ- ɪɴᴄɪᴅᴇɴᴛᴇ ᴍᴇ́ᴅɪᴄᴏ

ISAAC WALTER

Llevábamos en el médico veinte minutos, veinte minutos desde que se habían llevado a Nathan hacia una sala para hacerle pruebas.

La tía Katherine estaba sentada en una silla, con la cabeza entre sus manos, preocupada. Mientras que el tío George la acariciaba la espalda con delicadeza.

La sala de espera estaba en completo silencio. Lee, Danny y yo estábamos en las tres sillas juntas, Cole en un extremo y Alex en el otro, todos en silencio.

Saqué el móvil y decidí escribir un mensaje a Madison, quien probablemente estuviera saliendo del instituto en ese momento, y tenía que saber lo que había pasado.

<<Estamos en el hospital, a Nathan le han dado convulsiones y se ha desmayado>>

Apagué el móvil y lo volví a guardar en el bolsillo.

Movía la pierna nervioso, si ninguno hubiese empezado a pelear en el comedor, probablemente Nathan no estuviera en una camilla ahora mismo.

Pasaron otros quince minutos, y seguía sin haber noticias de Nathan.

Se oyó el ruido de las puertas correderas abrirse, y luego unos pasos apresurados que cada vez eran más fuertes.

-Katherine.

Su voz fue el único ruido que se había oído en la sala desde que habíamos llegado, y por un momento dejé de estar nervioso y me tranquilicé.

Todos nos giramos, viendo a Katherine abrazar a Maddie, quien estaba preocupada, se le notaba en los ojos.

-¿Cómo está Nathan?- preguntó la morena mientras abrazaba al tío George.

-No tenemos noticias todavía- anunció él.

Mi chica.

Espera, eso había sonado muy bien.

Pero volviendo al tema, mi chica (que suena de maravilla) abrazó a Cole, luego a su mellizo y posteriormente a mi hermano.

La miré cuando Lee la dedicó una sonrisa al separarse del abrazo. Intercambiamos mirada y esta solo se lanzó a abrazarme, rodeando mi cintura con sus brazos.

Tuve que dar un par de pasos hacia atrás por el impulso, pero rodeé su cuello y la di un beso en la cabeza, intentando tranquilizarla. Oía su respiración irregular, y como sus pulsaciones se aceleraban a causa de su preocupación.

Ella y Nathan siempre se habían llevado bien, desde el primer momento, por eso estaba tan alterada.

-Gracias por escribirme- murmuró sin separarse de mí.

-No podía no hacerlo- murmuré cerca de su oído.

Un médico apareció en la sala, y todos se levantaron para escuchar lo que venía a decir.

-¿Cómo está?- preguntó Katherine.

-Tengo buenas noticias- afirmó el doctor. Causando que Madison soltara todo el aire que tenía en los pulmones. -Nathan está despierto y habla, lo que es positivo- comenzó a explicar. -Sin embargo muestra confusión, lo cual descarta que las convulsiones fueran provocadas por un nivel bajo de azúcar o hiponatremia.

-¿Qué significa eso?- preguntó George.

-Que debería quedarse aquí- todos empezaron a preocuparse. -Solo como medida de precaución, le haremos varios electroencefalogramas.

-¿Se pondrá bien?- Maddie, quien se había acercado hasta el matrimonio, preguntó al médico.

-Claro que sí- este le sonrió. -Podéis pasar a verle- comentó a Katherine y a George.

Estos asintieron y se dirigieron hacia la sala, siguiendo al doctor. El silencio volvió a reinar en la sala, sin que nadie supiera qué hacer.

Danny se acercó a Maddie y la rodeó con sus brazos, abrazándola.

-Se pondrá bien- le aseguró el mayor.