Besos en Guerra ©

³⁵ Personaje secundario

"No puedo compartir lo que no se me dió. No soy la dueña de tu corazón. Yo soy quien sobra en esta habitación"
~Jesse & Joy.

Zayn

Lidia.

Lidia.

Lidia.

El mundo me da vueltas. Gira. Gira. No para. Todo a mi alrededor está borroso. Oigo la voz de Blair diciéndome que ella me espera en la zona de combate. Esperen. ¿Es la voz de Blair o la voz de Lidia la que me dice eso? No lo sé. No las puedo diferenciar. Tengo taquicardia. Estoy agitado, más de lo que acostumbro, fuera de lo habitual. ¿O es un ataque de pánico? No. No me sudan las manos. No lo están haciendo y además no tengo miedo. Es decir, ella no está aquí. Claro que no lo está.

No está aquí porque está muerta.

Yo la vi morir.

Yo sentí su pulso inexistente.

Yo vi su piel tiñiéndose de blanco.

No puedo creer lo que estoy escuchando, porque presencié su muerte en mis propios brazos. Pero aquí está, hablándome como si no hubiera pasado el tiempo. Como si yo no hubiera estado sufriendo cada puta noche del año en búsqueda de este día.

Mi corazón comienza a latir descontroladamente. Se va a salir de mi pecho. Unas manos tibias sostienen las mías y hacen que vuelva un poco al planeta tierra. Los dedos son pequeños, finos y suaves. Son de Blair. No tengo dudas. Cierro los ojos y trato de procesar esta información. ¿Cómo es posible todo esto? ¿Qué debo hacer?

Suspiro en búsqueda de algo de paz cuando todo deja de girarme. La confusión se apodera de mí y miro a Blair como refugio, quien ha captado la tensión en el aire y me observa preocupada, sin decir ni una sola palabra, como si ella también estuviera en shock, esperando ver cómo actúo ante lo sucedido. Veo el amor y la preocupación en sus ojos y mi corazón se llena de culpa. No puedo negar que también la amo, pero Lidia fue mi primer amor y siempre ocupará un espacio especial en mi corazón, lo que me aterra. Me aterra horrores porque ahora no puedo ver a Blair a los ojos sin sentirme el estúpido protagonista de un triángulo amoroso.

Mis pensamientos están nublados y mi instinto me dice que necesito ver a Lidia, asegurarme de que está realmente viva y aquí. Que respira. Que esto no es una trampa. Que esto no es una ilusión ni un sueño. Que puedo volver a abrazarla. Que puedo volver a verla.

Es por eso que la veo a Blair por última vez. Ella no me deja de mirarme hace rato, puedo sentir toda su energía puesta en mí, esperando a que yo tome una decisión, sabiendo lo difícil que es eso para mí.

—No me mire así —susurra ella con la voz rota. Emana preocupación. ¿Tanto se nota lo que estoy pensando?—. Vaya. Reencuentrese con ella. Yo también hubiera hecho lo mismo si hubiera sido al revés.

Era la voz de Blair la que me decía aquello. Lo era. Estoy seguro. Lo acabo de recordar.

"Está en la zona del combate"

"¿Me oye? Lidia está en la zona de combate, Zayn. Lo está buscando y se oye pérdida"

No estoy para otro tipo de respuestas hacia Blair, necesito aclararme varias dudas. Es por eso que corro, corro desesperado hacia la zona de combate, el lugar donde supuestamente se encuentra. Estoy agitado, mi respiración se corta, pero no me detengo. Los pasillos se hacen eternos. La veo en todos lados. Los recuerdos de nuestro amor pasan rápidamente por mi mente, mezclados con el dolor de su muerte, dándome un mal sabor en la boca.