—Gracias, Niall— le dio un beso en la mejilla.
—De nada, Hazz— me correspondió el beso.
—Copo...
—A ver, Louis. Yo ya sé todo— Harry trató de no reírse—. Y te advierto, no voy a dejar de tocarlo sólo porque eres posesivo.
—Me vale una mierda tu amenaza— dijo con una sonrisa maligna—. Es mío.
—Ya, niños— dijo Harry—. Nos vemos. Anda, bájate— dijo echando hacia adelante el asiento.
Niall se rio y avanzó en el coche, sacó la mano por la venta enseñándoles el dedo medio.
Caminaron por la oscuridad buscando la ventana que Violeta siempre les dejaba abierta. Pronto entraron, atravesaron la sala, el patio y subieron las escaleras.
—Que Niall y seguramente Jk, lo sepan no te da el derecho de andarlos besuqueando, eh— dijo mientras se quitaba la sudadera.
—Ay, no— se talló el rostro—. No me vengas con esa mierda. No dejaré de demostrarles cuanto los quiero sólo porque a ti te dan celos.
—No te estoy pidiendo eso, sólo exteriorizo mis emociones— se quitó los pantalones y se acostó.
—Ajá— Harry lo imitó.
—¿Realmente le pones un nueve sobre diez a la follada de ese chico?— dijo con una mueca.
Harry a penas pudo contener la carcajada que escapó de su pecho.
—Si— dijo picando el humor de Louis.
—Y fue mi culpa, el chico me debe un favor— se burló.
—Pues no creo que le hayas dado clases de como moverse— se dio la vuelta y alzó las caderas, buscando la cercanía de Louis.
—¡Oh!
El cálido cuerpo de Harry reclamó pronto las ganas que tenia de ser atendido.
—Dijiste que me...
—Sé lo que dije— comenzó a deslizar la mano por los calzoncillos de Harry—. Recuerdo muy bien el tono de tu voz y lo que dije. Tienes que pagármelas. Nunca había estado tan celoso, jodido bastardo.
Harry se rio. No era normal que Louis hablara así, pero parecía que ahora que precisaban una confianza mayor, el castaño ya no se tragaba sus palabras.
Los dedos de Louis juguetearon con su piel. No estaba seguro de lo que le haría, pero lo haría ver las estrellas, tocar el cielo, besar a Dios.
Harry era una persona dura, no gemía mucho, pero se retorcía con ganas. No habían hablado abiertamente de eso, Louis deseaba que se abriera, que gritara y gimiera como una puta, pero iba a ser muy difícil que Harry le diera rienda suelta a sus sensaciones.
Las manos de Louis siempre estaba calentitas, llenas de venas y suaves. Eran rosadas y aunque Harry las imaginó muchas veces al rededor de su cuerpo, imaginarlas y sentirlas eran cosas muy distintas, tenían un mundo de diferencia. Louis siempre fue muy juguetón, no importaba de que se tratara él siempre tenia algo que reconfortaba. El rizado jamás se quejaría por la manera en que movía los dedos al rededor de sus pezones, o como rasguñaba la piel de sus muslos, o como lamía, raspando su lengua con el vello que a penas se sentía en el pubis de Harry.
Ambos estaban calientes, sin cobija, sin ropa y con ganas de más, de mucho más. Harry exigía que lo besara. Sus labios se movía de arriba a abajo con una sensualidad que alucinaba, de vez en cuando la lengua de Louis lo incitaba a aumentar el ritmo, a besarlo con más fuerza, a morder sus labios, a besar a penas las comisuras de sus labios.
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Cuarteles de invierno 🌨️Larry S.🌨️ LT
FanfictionPor fin fueron libres. Y esa libertad se sintió bien. Tan bien que poco les importa no mirar a atrás.