°11°

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Luego de ese timbre, empezaron a tocar repentinamente la puerta.

Fui a por mis llaves para poder ver quien pingo era a estas horas.

Abrí la puerta para encontrarme a Lautaro, tenía una cara de nerviosismo y preocupación, y Enzo detrás de él.

Sin permiso alguno Lautaro entro rápido a mi apartamento.

-Permiso antes que nada!-Le dije desde la puerta viendo como se iba al living.

-Necesita hablar con vos, me pidió que lo acompañe porque le daba vergüenza.-Dijo Enzo cruzándose de brazos.

Mi mirada se poso en ellos, eran gruesos y muy musculosos, otra vez esa emoción aparecía en mi, no entiendo el porqué, o exactamente qué estaba pasando con Enzo y yo.

-Esta bien.-Dije volviéndolo a mirar y esperando a que pase.

El se me quedó mirándo igual que como yo lo había hecho hace unos segundos.

Su mirada tan hermosa? No se, realmente ya no sabía que podía traer con el.

-Vas a pasar?-Dije rompiendo el silencio.

-Si, perdón.

Paso lentamente hacia el living, haciéndose presencia de Lautaro que movía sus manos rápidamente.

-Que te paso?-Dije para dejar las llaves en la mesa del comedor que se conectaba con el living.

-Eres amiga de Maite?-Dijo el nervioso sin mirarme.

Frunci el ceño para sonreír, ya se por donde va esto, pero lo inquietante de saber que Enzo estaba en mi apartamento, visualizando cada parte de él, me ponía muy nerviosa.

-Si, que ocurre con ella?

Podría decir que fue un minuto de silencio eterno, las respiraciones de cada uno eran el único sonido escuchado aquí.

-Podrías conseguirme una cita con ella?-Dijo muy tímidamente.

Me quedé recalculando sus palabras, como le decía que Maite es Lesbiana? Si suena raro porque le ha atraído Enzo, pero fue la única vez en su vida que un hombre le intereso, ella ha tenido parejas mujeres, nunca le ha gustado un hombre, y si fue así, yo no me he enterado.

Ambos hombres me estaban mirando, haciendo que me ponga más nerviosa.

Mi mirada volvió a Lautaro para decirle que Maite era Lesbiana.

-Lo siento Lau, podría intentar, pero Maite le gustan las mujeres.-Le dije con un tono de tranquilidad, así llevaba bien las cosas.

No me respondió, solo bajo su cabeza en forma de decepción.

-Te dije que no ibas a poder.-Dijo Enzo con su voz grave, alterando de vuelta la emoción en mi.

El silencio nuevamente se aporedo de la sala, hasta que Lautaro se dirigió a la puerta para irse.

Sin antes agarrar las llaves rápido para cerrar la puerta y dejar a Enzo conmigo.

𝐃𝐈𝐅𝐄𝐑𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀𝐒 | 𝙴𝚗𝚣𝚘 𝚅𝚘𝚐𝚛𝚒𝚗𝚌𝚒𝚌Donde viven las historias. Descúbrelo ahora