Violeta se encontraba apoyada en la pared de la entrada de la universidad, el humo del cigarrillo se elevaba en el aire, y sus gafas de sol ocultaban sus ojos, aunque su mirada estaba fija en el vacío. La semana había sido una sucesión de intentos fallidos de hablar con Chiara, y la frustración pesaba en sus pensamientos.Recordaba la última vez que lo intentó, apenas hace un par de días. Mientras hacían una práctica para clase, el sonido del piano en la sala cercana llamó su atención. No dudó ni un segundo en escabullirse del grupo y dirigirse rápidamente hacia la fuente de la melodía, sabiendo que Chiara era la responsable. Pero cuando llegó, el piano estaba en silencio, y la sala estaba vacía. El eco de la música aún resonaba en su mente, una melodía inacabada que reflejaba la situación entre ellas.
Inmersa en sus sentimientos, una voz conocida rompió su ensimismamiento.
-¿Qué haces aquí? Llevo un rato buscándote. -Habló Juanjo.
-Pasando el rato. -Contestó Violeta dándole una calada al cigarrillo.
-Estamos todos los del grupo en la cafetería, vente anda. -Intentó convencerla el moreno.
-Pero, ¿a que no está Chiara?
-No, no está. -Respondió Juanjo sincero
-Lo sé, y es por mi culpa. No va a ir porque piensa que yo estaré allí.
-Vio, tienes que hablar con ella. Esta situación no es agradable para nadie. Además, lleváis casi una semana sin venir ninguna de las dos. Estamos todos empezando a conocernos y os estáis perdiendo un montón de cosas.
-¿Qué te crees que llevo intentando toda la semana? Ella intenta que no se le note, pero noto su decepción cada vez que me mira. Y cuando intento hablar con ella para explicarle la situación busca cualquier excusa y se marcha. No se que más hacer. -Confesó la reportera derrotada. Dió una última calada al cigarrillo y tiró la colilla.
-Pues tendrás que pillarla por banda y convencerla para que puedas explicarle las cosas. Pero no en la universidad.
A Violeta se le iluminó la cara ante las palabras de su amigo.
-¡Claro!, ya está Juanjo. Lo tengo. -Dijo ilusionada.
-Pues venga, suéltalo
-Tu me harías el tremendo favor, como buen amigo que eres. ¿De hablar con Martin para que me ayude a convencer a Chiara??
Juanjo se quedó unos segundos pensando.
-Sabes que no puedo hacer eso...
-Venga Juanjitooo -Intentó convencer Violeta con el tono más inocente que pudo.
-Lo que sí puedes hacer es hablar con él, y quizás así él pueda ayudarte. Pero créeme, si yo doy la cara por ti va a ser peor, creeme. -Explicó Juanjo
-Buff, eso significa que no me tienen mucho cariño que se diga. -insinuó Violeta algo triste
-Algo así, pero precisamente por eso eres tú la que debe de hablar con él para que vea que de verdad te arrepientes. Ahora tiene una clase libre, ibamos a irnos por ahí. Pero creo que es mejor que aproveches y hables con él. -Confesó Juanjo apoyando su mano en el hombro de su amiga.
-Juanjito, Juanjito -Dijo la morada esta vez con una sonrisa. -Así que estás dispuesto a no follar por ayudar a tu amiga, vas a conseguir que me eche a llorar. -Dijo Violeta fingiendo emoción haciendo el gesto de secarse una lágrima.
-Serás hija de puta -Expresó Juanjo mientras le daba un golpe en el brazo. -Venga, tira antes de que me arrepienta.
Esta vez Violeta abrazó a su amigo como forma de darle las gracias.
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Nuevos Sentimientos (Chiara y Violeta/Kivi)
FanfictionVioleta y Chiara dos chicas que han descubierto que algunas veces el destino es caprichoso , y ellas lo vivirán en primera persona.