Nuevos Sentimientos (Chiara y Violeta/Kivi)

XXXVI

Mientras Violeta se marchaba hacia la cocina Chiara se quedó en su habitación. Abrió la puerta del armario y cogió uno de sus pijamas, normalmente la inglesa suele dormir sin nada, en una ocasión diferente se hubiera puesto una camiseta con un tanga, pero a pesar de la ducha seguía notando su cuerpo destemplado.

Así que cogió un pantalón largo de pijama y se lo puso. A continuación rebuscó en el armario en busca de otro pantalón para Violeta, lo mínimo que podía hacer era dejarle algo cómodo después de todo lo que estaba haciendo por ella.

Violeta por su parte se encontraba en la cocina, de pie delante de la nevera abierta mientras se rascaba la cabeza pensando en los ingredientes que necesitaba. Los buscó, y una vez encontrados se puso en marcha con la sopa. Solía gustarle bastante cocinar, le relajaba. Y además le encantaba cocinar para sus amigos o familiares y ver como disfrutaban de la comida, pero en esta ocasión estaba algo nerviosa.

Quería de alguna forma impresionar a la británica con aquella comida, y se sentía nerviosa por preparar una simple sopa. Definitivamente Chiara despertaba sentimientos en ella que seguían sorprendiéndole. Mientras revolvía concentrada sintió unos brazos que la rodeaban por la cintura y la sacaban de su ensoñación. Chiara apoyó la cabeza en su espalda.

-Que bien huele -Comentó la inglesa.

-Si bien huele, mejor sabrá. -Respondió Violeta con una pequeña sonrisa, mientras se daba la vuelta para tenerla de frente, llevaba un pijama verde a juego que la hacía ver todavía más mona si se podía.

Chiara apoyó ligeramente su cuerpo al de Violeta debido al cansancio, y esta rodeó a la morena con los brazos por la cintura para sujetarla. Apoyó sus labios en su frente, y los dejó ahí durante unos cuantos segundos.

-What's happening? -Preguntó la mas pequeña.

-Solo estaba comprobando si tienes fiebre, pero no. Menos mal -Suspiró la reporta aliviada.

-Bueno... vaya excusa más mala. Si querías darme un besito solo tenías que decirlo. -Se burló la británica.

-Oyes, que va en serio. ¿Nunca te han mirado así la fiebre? -Preguntó incrédula.

-No que yo recuerde -confesó la morena.

-Siempre hay una primera vez para todo, y ahora me tienes a mí. -Dijo la morada guiñándole un ojo, consiguiendo que Chiara apartara la mirada por su comentario para no ponerse nerviosa.

-Por cierto, ¿cómo va la sopa Vivi?

-Ya casi está, solo hay que dejarla reposar.

-Perfect, te he dejado un pantalón de pijama en la habitación para que estés más cómoda, puedes ir a ponertelo si quieres.

-¿Me has dejado preparado el pijama de arbolitos? -Preguntó la reportera picando a la inglesa.

-Este es mejor todavía, y mi favorito. -Respondió la ojiverde.

-Te lo cuidaré entonces, no me gustaría tener que ver a una guiri enfadada. -Confesó la morada mientras daba un paso hacia la morena.

-Fuck you, darling -Respondió sentándose en la encimera.

Violeta se limitó a sonreír ante la respuesta de la británica, y se dispuso a marcharse a la habitación a cambiarse. Cuando sintió como Chiara agarraba su mano y la frenaba mientras la acercaba a su cuerpo quedándose entre sus piernas.

La postura era un tanto comprometida, pero Violeta dejó la mente en blanco y se dejó hacer. Sintió como Chiara rodeaba su cintura con las piernas y se escondía en su cuello.