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Mi error favorito



Me desperté desorientada, empapada en sudor y con el cuerpo entumecido. Al intentar levantarme, noté el problema.

Cristina y Meredith estaban abrazadas a mí como garrapatas a un chucho.

-Esto es increíble -volví a intentar levantarme, pero todo mi cuerpo estaba dormido.

-Chicas. Chicas, despertad -ni caso. -Como no os mováis os juro que voy a mataros en cuanto pueda moverme.

-Eres insoportable -se quejó Cristina despegándose de mí.

-Yo no fui la que os invitó a dormir aquí. Largaos para que pueda ducharme. Por vuestra culpa estoy asquerosa.

-No exageres. No sé cómo has podido dormir con la fiesta que montaron anoche Izzie y George -se levantó Mer.

-¿George ha pasado la noche aquí? -pregunté extrañada. -Estaba cabreado con ella.

-Se habrán reconciliado -las dos se dirigieron a la puerta.

-Eh, chicas. Hola. ¿Una ayudita? No puedo moverme por vuestra culpa.

Las dos se miraron antes de seguir andando como si yo no estuviera. Me reí por la estúpida situación y porque cada vez que intentaba moverme me dolía. -Cuando salga de aquí os voy a matar.

Después de ducharme, bajé a la cocina intentando olvidar el ruido de George vomitando. Encontré a las traidoras, Izzie y Alex en la cocina.

-Teme cargarse su compromiso con Burke -escuché a Mer.

-Está huyendo -entré asustándolas. -No me olvidaré de esto. Arpías.

-Se acabó. Tengo un plan. No quiere que me case para complacerle.

-Y es verdad.

-Así que... no habrá boda. Es simple, volveremos al pasado. Igual que estábamos. Un buen plan.

-Un mal plan -corregí mirando extrañada el comportamiento de Izzie.

-Me voy... a trabajar. Hasta luego -todos escuchamos un quejido horrible acercándose y asustando a Izzie. -¿Es George? ¿No estaba arriba potando?

-Ahora está potando abajo -señaló Alex.












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Por fin estaba fuera de urgencias, podría ver casos importantes como ahora, la embarazada desconocida. Mark le estaba enseñando cómo podría quedar su cara después de la operación.

Anatomía de GreyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora