♡*:.｡. cσqυєτσ cσrαʑσท .｡.:*♡ YoonMin (ℓiвrσ ∂σs)

💞 cαρiτυℓσ τrєiทτα y sєis 💞

JiMin se removió dormido cuando sintió que una mano se posaba sobre su trasero hasta ser amasado con puro morbo.

Era YoonGi.

— Yoon — Murmuró adormilado — Yoon, déjame dormir.

Abrazó mejor la almohada contra su pecho para seguir con ese rico sueño mientras YoonGi se mordía los labios al ver su gran trasero.

Puta.

Eran las seis de la mañana y él no pudo quedarse quieto cuando vio la posición de JiMin.

Pero dejando la lujuria mañanera de lado, sonrió al notar el puchero inconsciente que los gruesos labios del menor hacían porque su mejilla estaba contra la almohada y eso hacía que sus labios se abultaran.

JiMin era muy tierno. Es como si tal ternura lo había heredado de su tío.

Ambos, de cierta forma eran iguales, eran dos hombres tiernos, pero cuando se enojaban era una cosa fea de vivir.

— Yoon, déjame dormir — Pidió ante la mano que amasaba su trasero — Yoon.

Soltó una risita ante la voz tan adormecida de JiMin.

Le encantaba molestarlo porque sus quejas eran tan tiernas.

— ¡YoonGi!

JiMin se incorporó en la cama con el ceño fruncido y los ojos entreabiertos, generando que él sonría por lo adorable que se veía.

— Son las seis de la mañana, Yoon — Se quejó — Y ya me estás manoseando.

YoonGi rió justo antes de atraerlo a su pecho para que siguiera descansando.

Entonces, cuando JiMin se acomodó y pasó un brazo por su abdomen, él empezó a acariciar las desordenadas hebras rosáceas con suavidad mientras dejaba un beso sobre una de las pomposas mejillas.

— ¡Yoonie, preparé el desayuno!

Ante la voz de Zael en el último piso, tanto él como JiMin abrieron los ojos en grande.

— ¡Los huevos se quemaron un poquito, pero los probé y son comibles, Yoonie!

Los dos rieron porque sabían de que Zael se estaba esforzando por aprender a cocinar y prepararles el desayuno como sus hijos que eran.

Porque ya veía a JiMin como su hijo y no lo decía porque YajaTzael le coqueteara de la forma más descarada posible, sino porque era un chico dulce que logró ganarse su corazón.

— ¡El café también lo hice!

— Tu papá es toda una ternura andante — JiMin murmuró sobre el pecho del mayor — Y creí que las paredes seguían insonorizadas luego de ayer en la noche.

YoonGi negó con una sonrisa coqueta mientras acariciaba su espalda.

La noche anterior había encendido la insonorización en la habitación para poder follar tranquilo con JiMin y que su papá no llegara a escuchar los ruidos.

Pero, como sabía que Zael era como un niño y que si le quitaban el ojo por un minuto podría hacer un desastre, decidió desactivar la insonorización para poder escuchar el llamado de su papá ante alguien accidente que haría.

Ahora, la insonorización en la habitación era un sistema moderno que había dentro de las paredes y el techo que podían activarse y desactivarse digitalmente. Es decir, que con su celular podía manejarlo.

Por lo general, tenía dos celulares, el que utilizaba para sus cosas personales y el que ocupaba para el sistema de la casa, los coches, etc.

Tal sistema estaba en todas las habitaciones de la casa y tanto él, como su papá y JiMin podían controlarlos.