Capítulo 15. Ainhoa

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Ainhoa.
Termine de fregar los platos y me meti en la cama, ni siquiera espere que Raúl saliera de la ducha, estaba exausta y necesitaba descansar. Había accedido a quedarme en casa de Raúl, pero sabia que tendria que irme pronto de alli, despues de lo que habia pasado las cosas entre nosotros no iban a ser faciles, ademas solo había una cama que el se negaba a compartir conmigo y no queria que pasara mucho tiempo durmiendo en ese sofa. Mañana por la mañana saldría a buscar trabajo, al ser temporada alta con un poco de suerte encontraria algo pronto, también buscaria algun piso de alquier aun que fuera compartido. cogi mi movil y revise todas los mensajes y llamadas que tenia. victor estaba preocupado, practicamente no le habia dicho casi nada de donde estaba. le mande un mensaje diciendole que estaba bien, que tenia alojamiento y que mañamna saldria a buscar trabajo, habia tenido mucho lio para llamarlo, pero prometia hacerlo pronto. deje el movil en la mesilla y me dormi casi enseguida.

Estaba en una habitacion que no conocia de nada, de repente alguien entro por la puerta, era un señor mayor, podria ser mi abuelo. se acerco a mi y de un empujon me tiro en la cama. metio las manos bajo mi vestido y comemzo a tocarme.
-que cachondo me pone que ni siquiera tengas vello aun...
Mire hacia un lado, buscando ayuda y entonces la vi, alli estaba ella. su mirada me basto para darme cuenta de que no pensaba ayudarme.
-Vamos, se una niña buena, haz lo que te dice.
el hombre me incorporo en la cama, sentandome sobre ella. se bajo los pantalones y saco su miembro. cogio mi mano, y la coloco sobre el, obligandome a moverla arriba y abajo, estuvo asi un rato hasta que finalemente se corrio sobre mi mano, note como salia el liquido blanquecino y caliente y caia sobre ella...

entonces me desperte sobresaltada, estaba empapada en sudor y Raúl estaba a mi lado.

-eh eh tranquila pequeña, solo ha sido una pesadilla.
me abrace a el y comence a llorar, no recordaba la ultima noche que habia dormido del tiron y sin pesadillas, me perseguian cada vez que cerraba los ojos.
-¿quieres contarme que ha pasado?
no fui capaz de decir nada
-esta bien tranquila, pero llevas dos noches aqui y las dos has tenido pesadillas...
-¿puedes quedarte conmigo,por favor? no quiero estar sola...
-esta bien pequeña, vamos duérmete.
nos tumbamos en la cama, mi espalda contra su pecho, Raúl me envolvia con sus brazos y sin darme cuenta me quede de nuevo dormida.

Cuando abri los ojos estaba sola y la luz del sol entraba por la ventana iluminando asi toda la habitacion. mire el movil, eran las 10 de la mañana, tenia un mensaje de Raúl.

"buenos dias preciosa, estabas tan dormida que no he querido despertarte, me he ido a trabjar, te mando ubicación, si necesitas algo, ya sabes donde estoy. que pases un buen dia"

me levante de la cama y fui a preparme el desayuno, sali a la terraza, desayunar con esas vistas era una maravilla. Aproveche para llamar a Victor y ponerle al dia de mi situacion, no sabia muy bien que iba a decirle, no queria mentirle pero si se enteraba que me estaba quedado en casa de un chico que no conocia de nada, no tardaria en venir a por mi. Contesto al terce toque
-¡Enana por fin,me tenias preocupado! ¿como estas?
-bien, bien, no te precupes, mi llegada a sido todo un poco lio, pero ya esta todo controlado
-¿donde te estas quedando?
-en un hostal, encontre algo muy barato, no es gran cosa, pero esta bien hasta que encuentre algun piso, ahora saldre a buscar trabajo, aqui estan en temporada alta, asi que no creo que me cueste mucho encontrar algo
-por lo que veo no vas a volver...
-sabes que no puedo nano
-¿pero que ha pasado? ¿todo esto por una discusion? no es la primera vez que discutes con ella...
-no es solo por eso... son cosas nuestras, dejalo estar ¿quieres?
-esta bien, esta bien, pero sabes que aqui me tienes ¿verdad?
-si, lo se. oye te tengo que dejar ¿vale? vamos hablando, un beso, te quiero
-no desaparezcas de nuevo ¿ok? o tendre que ir a buscarte, te quiero enana.

Me termine el desayuno, recogi y me fui a arreglarme. Me puse un vestido de tirates finos de una tela muy fresquita, unas sandalias y me recogi el pelo en una coleta alta. Cogi el movil, el bolso y las llaves y sali. Lo primero que hice fue guardar la ubicacion del apartamento en el mapa, al menos asi me aseguraria de poder volver utilizando el gps. Como el apartamento estaba en la zona centrica, me dirigi al paseo donde habiamos estado el dia anterior ya que estaba repleto de tiendas y bares. Cai en la cuenta de que no tenia curriculum para entregar... lo tenia en el movil, pero necesitaba encontrar un lugar donde poder imprimirlo. Pregunte a uno de los viandantes y por suerte habia una papeleria cerca, una vez tuve los curriculums, comence a repartirlos. Lo deje en barios restaurantes y bares de copas, en una tienda de suvenirs y en un supermercado, aproveche la visita a este ultimo para hacer la compra. Raúl no me habia dado muchas pistas sobre que comprar, asi que compre lo basico, pan, leche, huevos, pasta, arroz... sali con la compra y me fui al apartamento a dejarlo todo.

No sabia si Raúl vendria a comer, le mande un mensaje preguntandole, su respuesta no tardo en llegar.

"me encantaria comer contigo, salgo a las tres"

genial, tenia tiempo de preparar algo. Me puse manos a la obra y prepare una ensalada de pasta con atún, huevo, maiz y aceitunas. esperaba que le gustase, mientras terminaba de preparalo todo y poner la mesa en la terraza, sono mi movil
-¿Hola?
-Tia, ¿donde estas? ¡me tienes preocupada!
-Oh, lo siento Rebeca, se que dije que te avisaria, pero la verdad ha sido todo un caos y aun me estoy intalando...
-¿que ha pasado?
-Ya sabes que la situacion en mi casa era insostenible, discutimos y me largue, no podia soportarlo mas
-lo se coco, ¿pero tanto a sido para irte de la ciudad? te echo mucho de menos...
-yo tambien nena, pero esta vez a sido direfente, ademas sabes que llevaba tiempo queriendo hacerlo, tarde o temprano tenia que pasar...
-¿y donde estas?
-estoy en tarifa, tengo mucho que contarte la verdad... pero ahora mismo tengo que colgar ¿vale? prometo contartelo todo muy pronto, solo dame unos dias para terminar de instalarme
-Esta bien, esta bien, vamos hablando ¿ok? te quiero coco
-y yo a ti, chao.

justo en ese momento Raúl entraba por la puerta

-Hola, pequeña! ¿que tal ha ido la mañana? dijo mientras se acercaba a mi, me cogia por la cintura y me daba un beso en la mejilla
-Bien, he preparado ensalada de pasta, espero que tengas hambre...
-mucha, dijo, mirandome con una sonrisilla en los labios

Nos sentamos a comer y fuimos hablando de que tal nos habia ido el dia a ambos, la verdad es que cuanto mas tiempo pasaba con el, mas a gusto y comoda me sentia a su lado. Terminamos de comer y fui a recoger la mesa cuando el se lavanto y dijo

-Has cocinado tu, me toca a mi fregar los platos

Me fui al sofa y encendi la tele aun que en realidad no la veia, no podia quitar la vista de Raul tan guapo con su pelo negro despeinado.

-¿que planes tienes para esta tarde? dijo
-la verdad es que no habia pensado nada...
-¿te apetece que vayamos a la playa? he quedado con Iván  y otros amigos para hacer surf
-vale, si, perfecto

termino de limpiar todo y se sento a mi lado en el sofa.

-¿te aptece que veamos una peli en netflix?
-vale

fue buscando entre la gran variedad de peliculas y series que habia, finalmente nos decidimos por la de Creed
-para que conozcas un poco mi mundo, dijo
-me encantan las pelis de boxeo, soy muy fan de rocky
-jajaja. me alegra oir eso. ven, asi estaremos mas comodos.

se recosto en el sofa, abrio las piernas para que me colocara entre ellas y me echo hacia atras, tumbandome sobre su pecho. La verdad, no me acostumbraba a su contacto, tocarle erizaba cada poro de mi piel y hacia que un calor recorriera mi cuerpo entero, poniendo especial atencion en mi sexo que palpitaba enloquecido. Raul no paro de hacerme caricias en los brazos y en la cabeza durante toda la pelicula. Al terminar dijo

-te ha gustado?
-si, mucho le conteste
-un dia tienes que venir a verme pelear
-mmmm, no se si soportaria ver como te hacen daño...
-la unica que puede hacerme daño en este momento, eres tu

cruzamos la mirada unos segundos, sus ojos verdes brillaban de deseo, note como el calor invadia mis mejillas haciendolas sonrosar, bajo la mirada hasta mis labios, sonrio y me beso.

Un viaje inesperado. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora