Detener el tiempo

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Los días parecían estar volando para Zelda, pronto se cumplirían 4 meses de haber llegado al antiguo reino de Hyrule, había aprendido mucho pero, lo que más le encantó aprender, era el usar sus poderes del tiempo.

Sonnia ya le había dado bastantes clases y ella había intentado retroceder todo lo que se cae con una cuchara como objeto de prueba, todo en vano, pero si algo había aprendido en la era es que su poder del tiempo parecía solo latir en su interior pero sin la piedra secreta, este no podía salir a flote ni podía ser usado como tal por Zelda, no como su poder sagrado al menos.

Aun así tenia toda la ayuda posible, la Zelda de la era pasada le intentaba dar ánimos para que pudiera controlar el tiempo como tal, también con uno que otro consejo como piensa en sus recuerdos, imagina que eres el objeto, canaliza tu poder interior en mover aquello, ese tipo de cosas que los campeones le decían para despertar su poder interior 100 años atrás, claro, nunca funcionó antes, no funcionara ahora, su padre era estricto diciéndole que las fuentes son lo único que despertaría su poder y Rauru parecía estar de acuerdo con que ella fuera a una fuente sagrada para controlar mejor su poder, no iría a una fuente ni aunque su vida dependiera de aquello, Sonnia y su hija le daban ánimos y eso era lo que más amaba de ellas, pero sus ánimos siempre eran como que canalizara su fuerza interior para despertar y controlar el poder, muy parecidos a lo dicho por los campeones, nadie en esa era podía subirle el ánimo como Link podía; a diferencia de su padre o de los campeones, Link nunca le decía que canalizara o que fuera a las fuentes para que de esa forma despertara su poder, él en cambio buscaba formas de animarla y otras maneras de despertar su poder, pero nunca, recordándole que no estaba dando lo mejor o que era un fracaso a la corona de Hyrule, nadie podía ayudarle de esa forma.

Aun así, Zelda agradecía todo el apoyo que le daban para controlar sus poderes, no era como en su era donde incluso las damas de compañía decían que era un fracaso o que era alguien inútil y que no merecía el trono de Hyrule por ser "salvaje" o no femenina, a Zelda nunca le gusto que hablaran así de ella cuando no tienen idea de lo que paso o lo que vivió, odiaba a esas personas que juzgaban por la superficie, y lo peor era que ella fue una de ellas cuando se quejaba de tener a Link como caballero guardián, diciendo que su vida era tan fácil y feliz a comparación de la suya, grave error ya que él también había perdido a su madre y su padre siempre le decía que no era suficiente, que si no trabajaba más, no salvaría a su reino, ambos fueron condenados a una vida de responsabilidades por los estúpidos triángulos que tenían en sus manos, muchos halababan aquellos triángulos sagrados, incluso se decía que quienes los poseían eran seres todo poderosos y cerca a las diosas, pero ellos sólo los veían con odio al ser la razón de sus males, más que una bendición para el pueblo, eran una maldición para los portadores, siendo condenados a una vida monótona sin importar la edad o el tiempo, un ciclo sin fin, en donde la diosa, el héroe y el heraldo, fueron los que cayeron ante la trampa, condenando a sus reencarnaciones de todos los tiempos hasta que la causa de todo, sea destruida.

Aunque nos desviamos del tema.

Zelda no tenía ni idea de cómo parar el tiempo, su poder no fluía como el de Rauru o Sonnia, nisiquiera había visto a su madre ser capaz de hacer aquello que ella pasaba, su espíritu le decía que no se preocupara y que lo lograría tarde o temprano, pero también quería evitar que la gente de la era le viera como un fracaso, le tenían tantas esperanzas por ser la decendiente de Rauru y Sonnia, si los decepcionaba, solo demostraría lo que mucha gente le decía, que era alguien que no merecía el trono al ser alguien salvaje y que no puede controlar su propio poder.

Pero, como podía hacerlo? Ni siquiera Link puede controlar el suyo, y eso que su "poder", por así decirlo, viene de la espada maestra, Link no puede oírla o lanzar rayos mágicos como las Bestias Divinas, lo máximo que lanza es una especie de disco de Luz, no sólo eso, también cuentan las leyendas de Rauru y Sonnia que los portadores de la trifuerza, obtienen los poderes de las 3 diosas siendo considerados los mensajeros de estas, junto a los 3 dragones claro.

La sabia del tiempoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora