Ｌｅａｌ ━ 𝖲𝗂𝗆𝗈𝗇 "𝙂𝙝𝙤𝙨𝙩" 𝖱𝗂𝗅𝖾𝗒

𝙇𝙪𝙣𝙖 𝙙𝙚 𝙈𝙞𝙚𝙡

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𝙸𝚝𝚊𝚕𝚒𝚊, 𝚂𝚒𝚌𝚒𝚕𝚒𝚊 

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Cuando aterrizaron, fueron al resort que habían reservado, Le Calette N°5, era un hotel muy hermoso y lujoso, teníamos un pequeño espacio como departamento en el que nos quedaríamos, todo se veía tan perfecto y la vista al mar era esplendida, además de contar con una piscina y Jacuzzi privado. 

- Me encanta, esto es como de ensueño. 

- Todo por mi dulce princesa, haría cualquier cosa por ti mi amor - me besó - vamos, hay que ver un poco más del lugar. 

Me vestí con un short jean y una camiseta blanca, mientras Simon llevaba lo mismo, íbamos combinados, como una pareja feliz, nuestras manos estaban unidas y nuestros anillos de compromiso se veían perfectos. Simon por el calor solo usaba un gorro, lentes de sol y una mascada que le cubría la mitad del rostro. 

- Te ves tan guapo mi amor - bajé la mascada y lo besé - no puedo creer que este casada contigo, me emociona tanto ser tu esposa. 

- Y yo adoro ser tu esposo - besó mi frente y me cargó en sus brazos - La señora Riley, mi señora. 

Ambos salieron su suite y fueron hacía recorrer algunos lugares turísticos, se tomaban fotos por todos lados, llegaron hasta el valle de los templos, un lugar muy conocido de donde estaban, habían un montón de turistas como ellos pero ellos especialmente llamaban la atención, tal vez era el brillo de los recién casados. 

Algunas personas les tomaban fotos, sin duda eran una hermosa pareja, algunos niños se les quedaban viendo con admiración. 

- Tenemos público - reí. 

- Así parece - besó mi frente y me abrazó. 

- ¿Qué se siente estar con la chica más linda y popular de aquí? - dije en forma de broma. 

- Yo siempre me siento así a donde sea que vaya contigo 

- Aww amor - me sonrojé y Simon tomó una fotografía de ese momento. 

Pasamos la tarde caminando y siguiendo visitando cada precioso lugar de ahí, ya por la noche pedimos cena para la suite porque no queríamos salir de la habitación. 

Nos trajeron Ravioli con milanesa y una botella de vino, nos dieron algunos dulces de cortesía. 

Yo usaba un camisón sobre mi ropa interior y Simon solo usaba sus boxers, queríamos comodidad y justo eso lográbamos.