Capítulo 5

655 56 3
                                    

Jack Conway

Los rayos del sol cayendo en mi rostro y un peso en mi cuerpo me obligan a abrir los ojos. Mi cabeza duele y da vueltas, y mi cuerpo pesa.

Después de varios segundos enfocando la vista logro descifrar lo que tengo enfrente.

Los brazos de Freddy me rodean el abdomen. Nuestros cuerpos están tan pegados que logro sentir el calor que genera el suyo, su respiración, puedo sentirlo todo.

¿Por qué cojones sigo acostado aquí?

Intento quitar con cuidado el brazo de Freddy de encima mío pero él hijo de puta no lo quita. Está rendido, muy dormido, pero tengo miedo de despertarlo y que ésto se vuelva mucho más incómodo.

Lo oigo murmurar algo en su sueños cuándo logro quitar sus brazos de encima mío. Noto cuándo salo de la cama; que él sigue con la ropa de trabajo, ni siquiera se ha quitado los zapatos.

Estoy a punto de salir de la habitación cuándo siento algo moverse detrás de mí.

-¿Te sientes mejor? -Su voz ronca me hace retroceder.

-Me duele la cabeza -respondo nervioso.

¿Nervioso?, ¿Yo?. Estoy perdido.

-Tomate algo, debes de tener alguna pastilla por allí -Me doy la vuelta y lo veo frotándose los ojos todavía en la cama.

-¿Qué pasó ayer? -pregunto sin rodeos.

-Follamos -me dice lo más serio posible-, ¿No te acuerdas? Joder Conway, fue la mejor noche de tú vida ¿Y no te acuerdas?.

Niego estupefacto.

¿Él y yo...? No, no, no...

Suelta una carcajada cuándo ve mi rostro, no me veo, pero siento que estoy pálido hasta el punto de parecer una hoja en blanco. Lo sé.

-Como te creés todo, neno -dice entre risas-. Fuimos al bar y te drogaste junto a una chica, cuándo te traje aquí me pediste que me quedara contigo, y eso hice.

-¿Yo te pedí que te quedaras? -Confundido pregunté.

-Ajá.

-No te creo.

Freddy sonríe divertido.

-¿Por qué te mentiría?

-Yo nunca te pediría esa tontería, y mucho menos a tí -Suelto las palabras sin pensar, y me arrepiento de inmediato.

Su sonrisa se borra y su ánimo decae.

-Lo sé, neno -Su voz también se oye diferente-, pero fue lo que pasó. Allá si me crees o no, es tú problema.

Se levanta de la cama y agarra su cosas de la mesita de noche.

-Me tengo que ir, te veo en la comisaría -Pasa por mi lado sin siquiera decir algo más, y segundos después oigo la puerta principal cerrarse.

No debí decir esa pendejada, primero) porqué sé qué es mentira, claro que le pediría eso. Segundo) no pensé bien en las palabras, está claro que eso no le gusto nada.

Cierro mis ojos intentando aliviar el fuerte dolor de cabeza que me da de repente.

"-Pero si te quedas, te quedarás aquí, conmigo."

Los recuerdos no tardan en llegar.

Lo veo a él acostado a mi lado, dormido. Joder... Nada sale de mi cabeza desde el momento en él que lo recuerdo, tan tranquilo, su respiración ligera, sus ojos cerrados, sus labios...

Perfecto errorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora