Capitulo 2: Desconfianza.
Chopper mostró a Robin el rostro dormido del chico tras haber limpiado con cuidado todos los rastros de polvo y sangre, a pesar de verse herido y con marcas era posible identificar a la perfección diversas características físicas que ponían al doctor en una situación muy difícil.
Se giró a ver a la morena y una pregunta quedó suspendida en el aire por varios segundos hasta que ella atino a asentir lentamente mientras llevaba una mano a su mentón.
"¿Acaso era familia de Zoro?"
-Es un poco sorprendente.- Fueron las palabras que escaparon de entre sus labios mientras se acercaba a ver con más detalle al chico, bajando un poco su rostro para poder ver esa nariz y el cabello.
-¿Crees que sea un hermano suyo? Yo no sé nada de su familia así que no sé si tenga hermanos.- La voz de chopper sonó como si estuviese a punto de ser cortada por un hilo gracias a lo tenso que se encontraba.- O tal vez sea su primo, ¿Crees? Aunque lo hubiese reconocido.
Robin miró el rostro del chico y comenzó a buscar todas las similitudes entre su joven rostro mallugado y el rostro del espadachín.
Tenia la misma nariz, eso era indiscutible, su perfil era sumamente parecido, los ojos color metal también eran un punto a considerar, pero el estilo de las cejas y la forma de los labios eran distintos, a pesar de tener un rostro masculino presentaba pequeñas facciones suaves, como un par de pecas dispersas en las mejillas, pecas que hacían recordar que era un niño, por que su rostro ahora tranquilo les ayudaba a saber que más de quince años no podría tener.
Tenia dos pendientes en la oreja, eran dos argollas doradas en la parte alta de la misma, y aunque no fuese idéntico, le daba aun más parecido a los que llevaba el peliverde.
Físicamente el parecido no era mucho, ya que era alguien que si bien tenia músculos marcados, no eran músculos sumamente definidos, aunque era alguien alto, alguien casi tan alto como Zoro o como Robin, pero era posible verle diversas cicatrices sobre el pecho desnudo y las rodillas parecía tenerlas destrozadas de tantas marcas.
-Lo dudo un poco, si hubiese sido su familia no le hubiese importado quitarse el gorro para que lo vieran, ¿O me equivoco?.- Murmuró Robin mirando de reojo el cabello del chico, lo cual era su característica distintiva y la que más les llamaba la atención.
Era eso lo que más le llamaba la atención mientras trataba de claramente ignorar la enorme cicatriz que cruzaba por el cuello del chico hasta su mentón y que se perdía debajo de su clavícula.
Chopper asintió lentamente intentando encontrar una solución lógica a todo eso, tal vez solo era una enorme coincidencia que hubiese llegado a ellos y tenia una muy buena explicación para los parecidos físicos, para su cuerpo maltratado y para la forma en la que cubría su cabello como un tesoro.
-¿Crees que haya una razón en especial para que haya venido aquí? ¿Qué tal si quiere llevarse a Zoro?- La voz de chopper tembló.- ¿Crees que quiera hacerle daño? ¿Y si quiere golpearlo?
Robin le sonrió al pequeño reno apretando con un poco de fuerza la libreta que llevaba en su mano para evitar hablar de más de algo que aún desconocía, había leído algo justo en la primera hoja que la había hecho dudar bastante de lo que usualmente hubiese creído en esa situación, así que debía encontrar un lugar en solitario para poder leer todo lo que iba escrito ahí y poder esclarecer su mente, sin duda no iba a decir nada y trataría de encontrar una solución lógica para poder ayudarlo.
-No lo sé, pero si el chico quería mantenerlo oculto, lo haremos, ¿De acuerdo? Sus motivos deberá tener para querer mantenerlo así, probablemente venga huyendo de algo o alguien que lo identifica con el cabello.- Robin se acercó a la mesa en donde reposaba el material de curación y tomó una venda.- Esperaremos a que despierte y que él nos diga todo, ¿No crees? Espero que nos de una muy buena respuesta.
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El Chico Que Puede Ver El Futuro [ZoroxRobin]
FanfictionMientras el sunny se encontraba en calma una mañana cualquiera, alguien burló a todos y salto a cubierta. Un joven herido, cansado y a punto del desmayo, con el rostro escondido y los ojos llenos de dolor. Cargaba consigo un par de katanas y una v...