Instinto

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El Alfa se levantó y tomo al Omega con fuerza para luego tumbarlo en la cama, se había contenido tratando de esconder el olor de sus feromonas para no afectar a ningún Omega pero llegó al máximo límite de su rut inesperado que llegó antes de lo que pensaba.
Son no era dueño de si mismo, se dejaba llevar por las feromonas que desprendía y que eran tan poderosas, a pesar de que el perfume antes aplicado por Can era fuerte y le confundía la mezcla, le era agradable.
No podía ver quién era debido a las máscaras que llevaban en la cara por más que trataba de hacerlo.
Era mucha la excitación que experimentaba que no se dio cuenta del momento en que el Alfa lo había despojado de toda su ropa hasta dejarlo desnudo.
Le agradaba el aroma que recibía  por lo que se olvidó de todo dejando que lo dominarán completamente.
El Alfa estaba más que excitado y también estaba fuera de si, no podía distinguir bien el olor del Omega pero era más su instinto por calmar su extasiado cuerpo.

El Alfa besaba el cuerpo del Omega que tenía a su merced, a pesar de dejarse llevar por sus instintos lo trataba como si fuera la persona que más amaba.

El Alfa se desnudo rápidamente mientras veía el cuerpo que tenía a la vista, era una piel blanca suave y se detuvo para ver su rostro pero no podía verlo ya que se ocultaba tras de una máscara. Solo podía ver unos ojos color miel que lo miraban impacientes.

Palpó la parte íntima que ya se alistaba para recibirlo, lo estimulaba y se podían escuchar los sonidos que hacía con el movimiento de sus dedos.

Son soltaba unas pequeñas lágrimas por la emoción que sentía de ser estimulado por primera vez.

Sin soportarlo más el Alfa tomo de la cintura y separo sus piernas, acomodándose poco a poco dio la estocada que lo unia al Omega quien cerró los ojos al sentir el dolor que recibía por primera vez. Sus gestos no se notaban debido al material que le cubría la cara. El Alfa trato de quitar el antifaz pero le era imposible por lo que solo beso el cuello blanco de ese Omega.

Son sentía por primera vez el placer de tener relaciones con un Alfa, el dolor que había sentido fue desapareciendo para convertirse en un éxtasis desconocido.
Recibía los toques y la penetración del Alfa una y otra vez. los dos comenzaron a llegar a un máximo placer imparable, cuando el Alfa lo tomo con fuerza tratando de llegar profundamente para hacer un nudo dentro del Omega, Son abrió los ojos y sintió un dolor al sentir que eran aplastadas sus entrañas. Tuvo lucidez en ese momento y trato de apartarse, pero el Alfa al sentir que quería huir lo rocio nuevamente de feromonas haciendo que su dolor disminuyera y cayó sobre el hombro del Alfa demostrándole sumisión, el cuello blanco le incitaba a morder para poder marcarlo pero no lo hizo, debido a que el olor del Omega lo confundía. (El Alfa olía el olor del perfume que Can le había rociado por lo que no podía oler su feromona real).
El placer no ceso y el Alfa lo hizo suyo toda la noche hasta quedar agotado.

Son se despertó de golpe y apenas se notaba una luz en señal de que estaba amaneciendo. Vio a su alrededor pero todo era desconocido, trato de tener más lucidez y trato de recordar lo sucedido. Volteo al otro lado de la cama y pudo ver al Alfa durmiendo, estaba tapado completamente hasta la cabeza y su rostro estaba hacia el otro lado.
Se notaba que no tenía una máscara como la de él, tenía curiosidad de ver de quién se trataba pero no podía quedarse más tiempo por miedo de que se despertara y lo tomara nuevamente sin dejarlo ir.
Se levantó lentamente de la cama con un gran dolor en todo su cuerpo, sabía lo que había pasado pero no podía quedarse a pensar detenidamente lo que había sucedido.
Se vistió lo más rápido que pudo, por suerte estaba toda su ropa. Una vez vestido se dirigió a la puerta cerciorandose de que aún siguiera dormido aquel Alfa, al no ver ningún movimiento abrió la puerta despacio deseando que no hubiera nadie afuera, era una suerte que aún siguiera con el antifaz puesto por Can para no ser reconocido si alguien lo veía.
No había nadie en el pasillo y vio en las escaleras que también estaban solitarias, bajo enseguida y de repente escucho murmullos por lo que se escondió para no ser visto ya que sería una vergüenza que supieran lo que había pasado.

La voz era de los sirvientes que se encontraban recogiendo y limpiando los destrozos de la fiesta. La puerta principal estaba enfrente de él por lo que se apuro a salir una vez que no había nadie.
Salió y cerro despacio, no había nadie en el jardín ya que todos estaban concentrados en la casa de adentro, camino sigilosamente ya que por lo que podía ver los dueños de la casa aún seguían dormidos.

Cuando salió completamente de la casa volteo a todos lados y se sintió aliviado de no ser visto. Camino tratando de alejarse y una vez hecho se detuvo para tomar un respiro, dio un suspiro y se recargo sobre la pared de una casa. Sentía mucho dolor debido a lo que había pasado, no sabía quién era esa persona y podía deducir que tampoco sabía la identidad de él, trato nuevamente de quitar el antifaz que le había sido de mucha ayuda.
Pudo quitarlo, pero no había sido tan fácil , tomo un taxi que lo llevará directamente a su casa. Sabía que sus padres estarían preocupados ya que quedó de avisarles para que le mandarán el auto que lo había llevado.

En el taxi trataba de recordar a detalle lo sucedido y sobre todo quién era la persona, pero no lograba hacerlo, no sabía si era familiar del festejado o su amigo, algún conocido, tampoco sabía lo que le diría a su padre al verlo. Sobre su rostro se derramaban lágrimas temiendo lo que vendría después, como había podido caer ante las feromonas de ese alfa. Aún tenía el olor del perfume puesto por Can que era muy fuerte por lo que no podía distinguir el olor del Alfa en si mismo a pesar de ser envuelto una y otra vez por sus feromonas. Can había dicho que era un perfume para bloquear las feromonas y no pudieran percibir el olor real, pero acaso también servía para hacerlo con un Alfa que lo recibía indirectamente, ya que el que había sido rociado era él. Se preguntaba si el olor que percibió era el real o la mezcla de ambos.

Cuando llegó a su casa, su padre estaba en la puerta y al verlo se alegró. No tenía cara para verlo por lo que tardo en bajar del taxi simulando que tardaba en pagar. Pero tampoco podía evitarlo.

- Son que bueno que has vuelto, te esperábamos desde hace rato. Estuvo buena la fiesta?

Son vio a su alegre padre y solo asintió.

- Me alegro de seguro vienes cansado y se ve que apenas puedes caminar, es mejor que vayas a dormir.

Caminaban los dos juntos y Son trataba de caminar normal a pesar del dolor que sentía. Pero su madre también llegó a recibirlo.

- Son!, Te vez cansado.... Que tal te la pasaste?

Miro a su madre y le dio una sonrisa.

- Estuvo bien, Can me traía de un lado a otro por lo que estoy rendido.

Su madre lo abrazo y después de darle un beso le dijo que se fuera a dormir, pero antes se dio cuenta de algo.

- Son!, Qué es?...

El Omega cerro los ojos por un momento, pensando que lo habían descubierto.

- Qué es ese olor?, no es tu aroma.

- Can me rocio de su perfume, después le diré que te lo muestre.

La mamá hizo un puchero.

- No, no.... No dejes que te lo vuelva a poner.

Dijo tapándose la nariz.
Por fin Son pudo subir a su recámara y sus padres habían ido a dormir también ya que lo habían esperado toda la noche.
Son se despojo de su ropa y la puso en una bolsa, su intención era tirarla apenas pudiera, por lo que la guardo en su ropero.
Entro al baño y mientras se enjabonada tocaba su piel recordando alguna que otra cosa que le venía a la mente. Sintió las ganas inmensas de llorar, esto no era lo que el hubiera querido. Siempre había soñado que se enamoraría y estaría con alguien donde su noche fuera especial y mágica.
Pero ahora todo había sucedido con un desconocido al que no volvería a ver seguramente, sentía pena por sus papás por la vergüenza de no poder contarles todo.
Sus lágrimas se confundía con el agua y de repente se sintió sucio al haber permitido que lo tomarán de esa manera.
Sabía que al casarse sería lo mismo pero al menos sabría que era su esposo y quién era la persona, pero con un total desconocido no era su idea....

Cuando salió del baño se vistió y se acostó en su cama, no sabía lo que le esperaba pero si estaba seguro de que esté recuerdo lo perseguirá por el resto de su vida......

A M A M EDonde viven las historias. Descúbrelo ahora