A M A M E

Hablando

- Puedo pasar?, me gustaría hablar contigo......

Son se rascaba la cabeza, pensando en que era de lo que quería hablar Pin, extendió la mano en señal de que podía pasar. Venía sonriendo por lo que imagino que quería ver a sus hijos.

- Lo siento, si vienes a ver a los niños, en este momento están dormidos ya que llegaron cansados. Pero puedes......

Pin lo interrumpió antes de que terminara.

- En realidad quiero que hablemos ambos, claro si es que no estás cansado también. Si es así, puedo venir otro día.

Evidentemente el Omega estaba cansado pero tenía mucha curiosidadd por saber lo que le iba a decir.

- Vayamos al despacho, ahí nadie podrá interrumpirnos.

Son lo guío, era un espacio amplio que daba vista al jardín por lo que más que un lugar de trabajo parecía un lugar de relajamiento. Entendía que Son era así de simple y buscaba que todo fuera más sencillo.
El Omega señalo un amplio sillón que se veía muy reconfortante.

- Toma asiento, quieres algo de tomar?.

- No, así estoy bien.

Son camino a otro sillón que se encontraba a un costado del Alfa para sentarse y escuchar lo que quería decirle.

- Te escucho.

Pin veía a Son que vestía informal, podía ver el cansancio y aún así le prestaba atención sin pedirle que fuera otro día por lo que agradecía el gesto.

- Yo, lamento lo del otro día. En realidad estaba muy molesto para entender razones...... Sé que cometí muchos errores en el pasado, pero quiero que me entiendas tu también.

- Lo hago, créeme Pin que lo entendí al ver tu expresión tan triste y entiendo que tuviste razón al decir que fui egoísta.

El Omega se levantó y camino hacia la ventana dirigiendo su vista al jardín. Pin lo siguió con la vista.

- Pero aquel día en verdad me sentí muy herido..... Horas antes estaba feliz al saber la noticia, por lo que lo primero que quería hacer era ir y decirte que ibas a ser padre. No sabía cómo ibas a reaccionar, pero quería arriesgarme y decirte también que tenía un hijo sin importarme si me ibas a rechazar.... Pero... Al escuchar que tú no me amabas senti un dolor tan profundo lo cual hizo que me arrepintiera y me fuí.

La vista del Omega reflejaba un gran dolor, era como si estuviera reviviendo nuevamente ese momento en vez de observar el lindo jardín.
Pin se levantó y camino hacia donde estaba Son.

- No deseaba que estuvieras conmigo solo por una obligación, por eso me aleje de tu vida.... Y si te soy sincero no deseaba que te enteraras nunca.

El Alfa sintió un dolor en el pecho al escuchar eso. Cerro los ojos por un momento, no deseaba reprochar nada más por lo que contuvo sus palabras y tomo a Son por los hombros.

- Ambos nos equivocamos.

Son sintió las manos del Alfa y al escuchar lo que decía solo asintió.

Pin lo abrazo y Son se sintió reconfortado.

El Alfa le hablo cerca de su oído.

- Son, si pudieras perdonarme por mi falta de amor.... Por no saber comunicarme y no ser sincero contigo.

El Omega sonrió y cayó vencido ante tales palabras.

- No solo tú te equivocaste, yo también lo hice al no decirte toda la verdad y solo deje que las cosas fluyeran. Si hubiera tenido la valentía de hablar contigo, no habríamos sufrido hasta este punto.