Química en común [AV]

Capítulo 26: "Estoy enamorado de ti, siempre lo estuve."

*Narra ____*

"¿Por qué Alonso se fue así tan repentinamente? ¿No se supone que veníamos juntos?" Al parecer pensé en voz alta, porque segundos después se escucho una voz...

Xxx: "Veníamos" Tú lo has dicho...- inmediatamente me puse de pie y giré, sabía perfectamente quién era, reconocería su voz a kilómetros.

____: Ohhh, Alonso hasta que te dignas a aparecer- dije indiferente.

Alonso: ¿Yo?

____: No, el pelirrojo chaparrón- me fulminó con la mirada- Obvio tú - aguanté la risa.

Alonso: ¿En serio notaste que no estaba?- se acercó un poco más hacía mi.

____: Claro, se supone que eras mi acompañante- los dos nos mirábamos intensamente a los ojos.

Alonso: Yo creo que ni siquiera lo notaste, digo estabas muy ocupada con tu amigo- dijo en un tono de reclamo.

____: ¿A caso Alonso Villalpando está celoso?- reí un poco.

Alonso: No para nada...- dijo como si no le importara.

____: Okey, entonces será mejor que me valla a mi casa, así que con tú permiso- tomé mis tacones y comencé a caminar pero él me detuvo y me giró de manera que quedamos frente a frente y muy cerca.

Alonso: Sabes que- negué y aún estábamos muy cerca- si, estoy MUY celoso- esperen ¿Qué acaba de decir? Es un sueño ¿verdad?, me separé de él.

____: JAJAJA- reí falsamente- no me hagas reír ¿Alonso Villalpando celoso de mí?- reí aún más falsamente mientras el me fulminaba.

Alonso: Si, estoy MUY celoso señorita Hernández- Dejé de reír y lo miré fijamente, ¡Lo decía enserio!.

____: Pues no veo porque tendrías que estar celoso, tú y yo- dije haciendo señas- Sólo somos AMIGOS!- resalté la última palabra y él se quedó callado, entonces habló.

Alonso: Lo sé, pero dime ¿A caso tú sabes lo que siento por ti?- sentí como todo mi cuerpo comenzaba a temblar y mi corazón latía más fuerte que nunca, sigo sin creer que ésto esté pasando.

____: No- dije a medias, él me miraba fijamente cómo jamás lo había hecho, en sus ojos veía amor, tristeza y decepción.

Alonso: Ven, siéntate te contaré una historia- me señaló la banca para que me sentara y así lo hice, después el también se sentó- Verás, hace unos meses mi padre obtuvo un empleo en está parte de la ciudad y al principio yo no estaba muy seguro de querer mudarme pero ahora se que mudarme aquí es lo segundo mejor que me ha pasado en la vida, recuerdo uno de los días de la mudanza; cómo sabes tengo un hermano pequeño y el estaba muy insistente con que quería un Starbucks y pues yo como buen hermano mayor tuve que ir a comprárselo- reí ante lo último- recuerdo que cuando llegué ahí mire a todas partes buscando algo, pero ni yo mismo sabía que - el rió y miró hacía abajo sonriendo- me formé al final de la fila y observe el inicio de ésta misma, estaba una señora, una chica peli negra y una castaña- sonreía abiertamente y creo que yo hacía lo mismo- Un rato después miré de nuevo al frente, sólo que ahora miraba a un punto fijo, a esa chica castaña, la observé con atención, cada razgo se su hermosa cara- sentí mis mejillas arder- ella me miraba en ocasiones y sonreía, yo le devolvía la sonrisa, hasta que la vi desaparecer por la puerta y pensé que jamás volvería a verla- lo miré directamente a los ojos- Entonces llegó la hora de entrar a mi nueva escuela, la verdad creí que sería el peor año de mi vida, pero justo el primer día iba caminando pensando el esa castaña y pumm choqué con una chica, sus libros cayeron al suelo y yo como buen caballero la ayude- reí un poco- Entonces la miré y supe que era ella, la chica que no había podido sacar de mi mente en todo el verano, la que creí que jamás volvería a ver estaba frente a mi y ella ni siquiera me miraba, ella se dio la vuelta para irse pero esta vez no la dejaría ir sin antes saber su nombre, la tomé del brazo y la giré hacía mi quedando frente a frente, la observé detenidamente, sus ojos café claro eran aún más hermosos de cerca, sus mejillas tomaban un tono rosado que la hacía verse aún más hermosa, y sus labios- se detuvo un momento y volvió a hablar- toda ella era perfecta, es un momento que jamás olvidaré podría jurar que sentí que sólo éramos ella y yo en toda la escuela, entonces me di cuenta que no le había dicho nada y a penas dije- él iba a continuar pero yo lo interrumpí.