Lenin [asistente de Lavi] rueda sus ojos una y otra vez mientras escucha a su jefe, ya le duelen los oídos. Lavi no había parado de hablar desde que llegó a la oficina, hace si trabajo pero sigue hablando como si nada, eso no es un impedimento para realizar un trabajo perfecto.
Ser un dragón era muy bueno, no tenías que mantener toda tu concentración en una sola cosa, podías hacer muchas a la vez. Y Lenin estaba maldiciendo esa habilidad porque quería que dejara de hablar sobre como sufre por la frialdad de Jaden, estos últimos días.
Que quiso muchas veces e invadir la habitación, abrazar al joven malhumorado que le está haciendo la ley del hielo, sin embargo, no rompió las órdenes estrictas dadas por Jaden, porque presentía que esa ley podría escalar a un nivel diferente, ya no sería una semana sin poder besarle.
Mientras Lenin escuchaba se sorprendía por las palabras y expresiones abatidas de Lavi, pero eso solo paso el primer día, luego de ese día todo se volvió una tortura para él, el escuchar lo mismo una y otra vez hasta que sus oídos sangraban.
—¿Algún consejo?—Preguntó, poniendo toda su atención en su asistente. ¿Acaso no podía leer las expresiones de Lenin? Todo el gritaba: "callarse, lleva repitiendo lo mismo por una maldita semana."
No me pagan lo suficiente como para estar escuchando las quejas amorosas de mi antipático jefe, ¡no soy un consejero, maldición! En momentos como estos me entran unas inmensas ganas de volver a mi antiguo trabajo, cuando solo cortaba cabezas sin preguntar ni siquiera sus nombres, porque no me interesaba.
Eran enemigos, no era necesario ser cortes con quienes querían invadir, o pasar la frontera ilegalmente entre nuestro reino y la otra vida marítima que siempre está esperando la oportunidad para tomarlo todo.
Al igual que existen siete mares también existen siete reinos, pero cinco de ellos tienen estrechos acuerdos y justamente sean dejado guiar por ese reino con sus ridículas tradiciones e ideales. [Reino o imperio Boreal] es el lugar donde vive ese anciano [abuelo de Lavi y Bastian] Y también es el consejero íntimo del actual dragón que gobierna allí.
Se podría decir que nuestro reino está absuelto de cada uno de esos siete reinos, no tenemos nada que ver con ellos, tampoco tenemos la obligación de intervenir en ninguna guerra que llegue a desarrollarse. Todo eso cambiaría si esos reinos tratasen de venir contra nosotros, lo cual es poco probable por la protección puesta por Lavi.
Nuestro reino tiene muchas seguridad como más de una barrera, cuando Lavi hizo algo como eso tan solo tenía unos 4 años creo, no recuerdo muy bien. Pero, fue abrumador sentir toda esa energía abandonado su cuerpo y aun así no hubo tal agotamiento en él, ni siquiera sudo. Eso fue como respirar para él.
Fue bueno que ese viejo no se enteró de lo especial que es Lavi, porque si eso hubiera pasado creo que a Lavi no le hubiese importado hacer lo que le dijera, de por sí era un niño sin emociones y a sus ojos todo era nada.
Se fue volviendo un poco más humano cuándo su padre y hermano hacia de todo para que logrará tomarle aprecio a algo, y ese algo fue su familia. Sin embargo, ni ellos con todos sus esfuerzos no lograron hacer lo que Jaden, a logrado en poco tiempo.
—Quien te manda a sugerir tal cosa, más cuando tú tampoco lo querías—Expresó.—No debiste decirle algo como eso, ¿en qué estabas pensando?
Solo quiero terminar mi trabajo e irme a tomar un rato, olvidarme que soy explotado por mi insensible jefe, que últimamente se encuentra muy extraño.
—Estaba claro que él, se terminaría molestado si es que no piensa que solo lo usaste.—Quise reírme cuando lo vi volverse pálido.—Si mi pareja me dijera que no lo toque luego de tener una noche agradable, lo mato.—Siguió avivado las llamas.—Me sentiría usado.
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¡Eres el padre, hazte responsable!
FantasyEstába tan emocionado, después de ahorrar tanto por fin podría ir a Alaska. Pero Dios, el destinó, no lo sé. Tenían unos planes completamente diferentes a los míos. El barco en el que iba terminó hundiéndose peor que el Titanic. Toda mi vida pasó fr...