¡Eres el padre, hazte responsable!

capitulo 55

Sharik bajo su cabeza con el fin de que Amaru creyera que está temblando de miedo, temeroso y nervioso por la expresión enfurecida del anciano, esas sed de sangre y desgarrar a cualquier persona que se le crucé.

Enojado de que cabía la posibilidad de que el oráculo le haya visto la cara de estúpido, eso es lo que más coraje le da en vez de estar sintiendo lástima por los años agobiantes que ha tenido que vivir Sharik, acausa de esa profecía. Sin embargo para Amarus eso era lo de menos por no decir que le daba igual, ya que de una forma u otra cumplió ese papel así haya sido por suerte.

—Explicarte bien.—No le gustaba para el rumbo de la conversación.

—Así como lo escucho, no soy la pareja del dragón celestial.—Me siento tan nauseabundo siento sumiso.—Luego de que me dejara en este estado logré escapar aunque mi...mi guardia termino gravemente lastimado.—De sus labios se desliza gotas de sangre.—No creó que logré sobrevivir y todo por salvarme.

—¡¿Qué pasó con mi gente?!—Le dió igual las condiciones en las que se encontrará Catriel.—¿Dónde está?

—¿Acaso no le cayó el mensaje de auxilio?

—¿Qué?...no.

—Entonces no tuvo el tiempo suficiente, ahora entiendo porque nunca vino a nuestro rescaté.—Sonríe con tristeza.

—¿Está muerto?

—Sí, ni siquiera tuvo tiempo de defenderse cuando se volvió cenizas.

—¡Nereo no hizo nada!

—Gracias a él sigo respirando, por el fuimos liberados luego de estar encerrados en un lugar oscuro. Y todo fue obra del dragón celestial.—Enfatiza.

‹Tuve que haberle hecho caso a mis instintos de que algo extraño estába pasando, sobre todo al ser tan consciente de que el oráculo odia a los dragones, ¿cuánto tiempo llevá planeando esto? Ahora todo tiene sentido, del porque cada vez que recibía una profecía, o revelación de ella siempre quedaba débil y antes no era así.

¡Él muy maldito recibía daño interno cada vez que recibía una revelación! No le importaba recibir la irá de los dioses por hacer eso, más bien debió ser un regaló para el oráculo porque lo llevaría a la tan aclamada muerte, a estado esperando por ella desde hace cientos de años.

¡¡Maldita sea como no me di cuenta de eso!! Estába tan embriagado con el futuro nacimiento del dragón celestial, que no le preste atención a lo demás. ¡Tan absurdo! Es por eso que también era tan compresivo con sharik y en todo momento quería verlo a solas para hablar sobre esto.›

La furia desenfrenada en Amaru también se estaba filtrando por todo el reino, sacudiendo cada rincón de ese lugar. Cuando se enoja no logra del todo estabilizar sus emociones.

—¿Entonces quién es el dragón celestial? ¿Como conoce a Nereo?—De un solo puñetazo rompió la pared.

Si atacó a Sharik quiere decir que se sintió amenazado, o tal vez no le gusto escuchar la arrogancia en la voz de Sharik. Este mocoso fue educado de esa manera, nunca tenía que bajar la cabeza ante nadie solamente en mi presencia por supuesto.

—¿Cuántos años tiene?—Rompió otra pared.—¿Cómo sabes que ese el dragón celestial si fuiste un inútil desde un principio?—Sigue siento interrogado.

No había ni una pizca de remordimiento en él, orillando a Sharik morderse el interior de su boca tan fuerte como sea posible. Tenía que manterse sereno, no dejarse llevar por las emociones que lo carcomen desde adentro, esas que le gritan que vaya donde Amaru y le arranqué la cabeza. Pero, él ya había llegado hasta este punto el esperar un poco mas para hacer algo como eso; no es nada si al final valdrá la pena. Él podrá ejercer el gran peso de su venganza en Amaru, hacerle algo mas que solo arrancar su cabeza.