Frente a las puertas de una propiedad pintoresca pero agradable y hogareña se encuentra tres personas, de pie, observando todo a su alrededor.
Habían llegado con toda la intención de causar más que solo un revuelo en esa propiedad, Jaden por fin tenía planeado hacerles pagar a cada uno de ellos, a esa familia que durante tanto tiempo le hicieron la vida imposible.
Tras una semana de reposo por obligación porque Lavi, le prohibió cualquier movimiento a Jaden, ni siquiera se dejaba tocar íntimamente por más que lo deseará con ansias. No podía permitir que Jaden y la sandía tengan algún percance mientras hacían el amor, por eso ambos se encontraban en abstinencia, Jaden no porque lo quisiera, lo estaban obligando.
Jaden todo enojado por el comportamiento de el dragón, lo termino echando de la habitación a Lavi. Sino lo iba a dejar tocar, entonces mucho menos quería tenerlo cerca cuando el dragón, con solo verlo lo estába invitando a pecar, es lo Jaden sentía cuando veía a Lavi.
Por lo tanto mientras dormían en habitación separadas y Jaden imponía la ley del hielo a Lavi, él se concentró en su trabajo o pasatiempo que es dibujar, al igual que planeaba como hacerles pagar a la familia que le quitó absolutamente todo.
Es así como llegaron a este momento, Jaden tenía pensado vender la casa que le dejó su padre, a él. Esa propiedad frente a sus ojos le pertenece. Orlando no logró obtener la firma de Jaden por más que lo intentó.
Jaden se reuso firmar y ser despojado de lo que es suyo, un recuerdo dejado por su padre. Así recibirá tremendas palizas siguió sin firmar y ese es uno de los tantos motivos por el cual esa familia no lo echó a la calle. Tenían que tenerlo controlado para que no se le ocurrirá la “magnífica” idea de vender la casa, aunque Orlando a tenido esos papeles siempre con él.
De igual manera eso no es algo que le preocupe a Jaden, si levanta una denuncia por obligación Orlando, (madre de Dagoberto). Tendrá que mostrar las pruebas de que estoy mintiendo y es así donde se descubrirá las mentiras de él. Qué el único que dice la verdad es Jaden.
Primeramente es él quién quiere darles la buena noticia a esa familia, que mañana seran desalojados de la propiedad porque ya fue puesta en venta. Jaden también les dará una demanda para que le regresen cada sentado que fue robado y le pertenecía a él.
Lavi por medio de Fercho le informó a Jaden, que no se preocupe por los del abogado u otra cosa, él ya tiene todo solucionado que ni siquiera a al corte van allegar. (Y sí, es literal la imponencia de la ley del hielo, Jaden está muy molesto por como Lavi, lo privó de poder acariciar el cuerpo del dragón.) Lavi se encuentra mortificado por eso.
—¿Nervioso?—Preguntó Dinora, con un bate en su mano.
Ella se emocionó mucho cuando Jaden el llamo y le comentó sobre lo que haría, dejó el juego que estaba jugando a medía partida para llegar lo más rápido a la casa de Jaden. Sus compañeros de juego en este momento la siguen maldiciendo por irse sin avisar, nada.
—No te preocupes, ¿ves este hermoso?—Besa el bate.—Se encuentra muy ansioso por golpear algunas pelotas y enviarlas completamente lejos.—Hace una muca de realizar un jonrón.
Me emocioné tanto al saber que este momento por fin había llegado, lo estuve esperando más que Jaden, creo. Está familia me debe mucho y tiene que pagar todos sus crímenes especial cuando obligaron a Jaden, irse con ellos o me meterían a la cárcel por intento de secuestro y en proceso a mis padres.
—No lo estoy.
¿Con que este es el lugar dónde vivió la mayor parte de su vida el anterior Jaden? Es una propiedad muy hermosa, ¿cuánto me darán si la vendo? Creó que es lo que hubiese querido el anterior dueño de este cuerpo, que está sea habitada por una familia que sea merecedora de atesorar los recuerdos dejados. Yo, voy hacer ese deseo posible, enviaré a todas esas personas que viven ahí adentro a la mierda.
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¡Eres el padre, hazte responsable!
FantasíaEstába tan emocionado, después de ahorrar tanto por fin podría ir a Alaska. Pero Dios, el destinó, no lo sé. Tenían unos planes completamente diferentes a los míos. El barco en el que iba terminó hundiéndose peor que el Titanic. Toda mi vida pasó fr...