Ángeles Entre Nosotros | SIN EDITAR

8. Pillamada Tensa

-Bien, cariño, tienes todos los números necesarios en el refrigerador.-dice Dalia mientras termina de acomodar su cabello y dar los ultimos toques a su maquillaje.-Cualquier problema que surja, sólo llamanos y vendremos.

Claro, como si yo fuera a arruinarles la velada. Ellos merecen un tiempo solos de adultos, sin Kyle y yo molestándolos. Despues de todo, ¿cada cuanto se cumplen 10 años de casados y se es feliz? Es algo que debe festejarse.

-Dal...-me interrumpe.

-Mamá.-contradice.-Soy tu mamá, Thea.

Le sonrio forzosamente y evado su mirada. No termino de acostumbrarme a esta vida, a pesar ya de vivir algunos años con ellos. Aclaro mi garganta.

-Mamá.-que raro se siente decir esa palabra.-Llamaré si hay algun problema, sólo vayan a su cena de aniversario.

-Okey, okey.-resoplo con alivio.-¿También vendrá Cameron?

El solo escucharla decir ese nombre y ver esa mirada pícara que me lanza, hace que mis mejillas enrojezcan.

-No, él no vendrá.-que incómodo es esto, joder-Sólo la chica.

Mis nuevos padres se entusiasmaron mucho cuando les dije que hoy me acompañaría una compañera para entretenerme mientras cuido a mi hermano. Hicieron muchas preguntas, creo porque todavía no se creían que su hija fuera más que una antisocial fracasada. No les culpo. Yo todavia sigo creyendo que lo soy.

-¿Segura?-me sonrie divertida.-Porque no me negaría a que ese chico viniera, es muy educado y amable a pesar de lo que podría manifestar su cabello o su forma de vestir...

-Mamá...-digo seria.

-No te enojes, sólo digo que es guapo y parece que le gustas...-me guiña un ojo a la vez que se reincorpora de una silla.

-¡Mamá!-que verguenza.

Ella rie a medida que sale de la habitación, la sigo resoplando con fastidio. Bajamos las escaleras y al final de ellas nos espera Marcus con Kyle en brazos.

-Aww, mis hombres.-dice Dalia al ver a Marcus jugar con Kyle, se besan y sonrien entre los tres, están muy enamorados y felices. Lo único que no cuadra en está familia perfecta soy yo.

Suena el timbre de la entrada y me dirijo a ella con algo de sudor en mis manos. Trago saliva y abro, descubriendo a Clarissa con una almohada, una bolsa de dormir y una mochilla. Me sonrie al verme.

-¡Hola, Thea!-chilla emocionada.

-Hey.-mi saludo.-Uhmm... pasa.

Abro más la puerta y ella entra, encontrándose con la mirada feliz de Dalia y amable de Marcus. Ellos están felices, hasta Clarissa, pero sigo sintiéndome desencajada en esta situación.

-Hola, tu debes ser la nueva amiga de Thea.-dice Marcus con cordialidad, extiende su mano en dirección de Clarissa, ella la acepta.-Soy Marcus, su padre.

-¡Mucho gusto, señor!-sonrie ella.

-Y yo soy su madre, Dalia.-dice mamá también extendiendo su mano para estrechar la de Clarissa.

-¡Oh, gusto en conocerla, señora!-estrechan manos.-Es un gusto conocerlos a ambos. Mi nombre es Clarissa Wayne.

-Bienvenida y esperamos que la pasen bien esta noche.-dice Marcus entregándome a Kyle, besa su cabeza y luego la mia, toma la mano de Dalía.-Nosotros ya nos vamos.

Recogen sus abrigos y se aproximan hacia la puerta, sonrientes. Kyle golpea mi cabeza con un estupido juguete y luego estampa su mano libre en mi cara. Joder, maldito niño. Dalía se aproxima y nos abraza.