Ángeles Entre Nosotros | SIN EDITAR

51. Bipolaridad

Cameron P.D.V.

Son las seis de la mañana, ya está empezando a amanecer, un poco de luz entra por la ventana, todo está en silencio en el departamento. Apolo sigue durmiendo como un tronco, lo raro es que no he escuchado a Lucían levantarse, como suele hacer generalmente.

Da igual, me fastidiaria que entrase a molestar que nos levantemos. Es sábado. Los sábados se duerme hasta la tarde.

Hay nubes en el cielo, muy grises, parece que viene una tormenta. No tengo ganas de levantarme de la cama, solo quiero que todo el día pase así, en silencio.

No tengo ganas de hacer absolutamente nada. Siento algo deslizarse por mi mejilla, es una lágrima. La seco con brusquedad y me pongo a escuchar algo de música. Degausser, de Brand New.

Luego Like Spinning Plates, de Radiohead.

Joder. Adam's Song.

Apago el móvil, y me cubro con mi almohada. Ese inexplicable y molesto ruido aparece otra vez en mi cabeza, así le digo a todas las cosas malas que sumergen a mi conciencia; experiencias, sentimientos, pensamientos llenos de culpa, remordimiento, enojo, odio, miedo. Cosas que me dan ansiedad y preocupación, algo que por mas que quiera ignorar u olvidar, siempre vuelven.

Me torturo bastante con el pasado. Lo que no debí hacer, lo que si. Algo así como... ¿Fallaste en esto? Fracaso, se supone que debes ser mejor. ¿No conseguiste esto? Idiota, es tan fácil. ¿Porque no puedes ser normal como todos? No es dificil, todos los demás son normales.

Debes ser esto, no debes ser aquello, y por amor a dios, no se te ocurra soñar con esas idioteces.

Mira a los demás. Ve todas las cosas que han conseguido, mira en quienes se han convertido, hasta donde han llegado. ¿Y tú? ¿Que puedes decirme? No has echo una mierda de tu existencia.

Eres un desperticio de tiempo, lugar. ¿Porque no haces algo con tu vida, vago de mierda? Oh, si, no eres lo suficientemente inteligente.
Lo suficientemente fuerte.

Lo suficientemente valiente para hacer algo.

Prefieres estancarte en tu miseria y llorar como lo haces ahora. Das asco, hazle un favor a todos y ya suicidate.

Todos van a estar mejor sin ti. Ni van a notar que te fuiste.

Haz por lo menos eso.

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Apolo P.D.V.

Me despierto lentamente, escucho unos lamentos a unos metros de mi, me giro extrañado y noto que los ruidos vienen de debajo de la manta de Cameron. Me siento y miro en esa dirección tenso y ansioso. Aclaro mi garganta.

—Oye...—se siente tan bizarro pregúntale si esta bien.—¿Sigues vivo?

El no me contesta, pero puedo oírlo moquillear y su respiración entrecortada, resoplo.

—¿Sabes que hacia mi madre cuando comenzaba a llorar y no paraba?—el sigue sin contestar, pero sus llantos se aminoran un poco.—Ella me cogía y soplaba sobre mi estómago para hacerme cosquillas. Y luego llenaba de besos mi cara y me decía lo mucho que me amaba.

—De aqui, atravesando toda la galaxia.—sonrio nostálgico recordando.

Cameron se destapa y descubre su rostro lloroso, sus ojos y nariz rojas, me mira medio extrañado y medio fastidiado.