Bostezo pesadamente cuando mi despertador suena, me levante una hora antes para poder llegar tiempo a la clase del profesor Hugo, y así evitar que me deje fuera de su clase por milésima vez; Si vuelvo a faltar una vez más reprobare su materia.
No quiero escuchar los gritos a través del teléfono de mi madre.
Yo vivo en el estado de california y mi madre en Washington, la razón es simple: decidí estudiar en la universidad de california.
Me costó mucho convencerla, pero al final accedió con la condición de que mínimo pasara con 8 en las materias ¿Y adivina qué? Iba pasando con 3 en la clase del profesor Hugo, ese señor me odiaba. Estaba segura que me había hecho algún tipo de brujería para que siempre llegara tarde a su clase.
Mejor dicho, el universo estaba contra mí las 24 horas del día los 7 días de la semana, estaba harta y esta noche iba tomar acciones para tener una mejor surte.
Al ducharme el agua caliente caía por mi cuerpo relajándome los músculos, antes de meterme revise si en vez de agua no era sal, ya que con la mala suerte que tenía parecía que me bañaba en ella.
Salí de mi apartamento una hora antes, por lo que tuve que tomar un Uber ya que el bus del colegio pasaba una hora después.
Ya habían pasado 10 minutos y mi Uber no llegaba, estaba entrando en desesperación; justo cuando me estaba quejando con el universo llegó.
—Buenas madrugadas —salude al señor del Uber.
—Buenos días señorita —saludo cordial y le sonreí.
Estábamos llegando al centro de la ciudad cuando había un traque esperándonos, esperándome, otra vez el universo se reía de mí en mi cara y me daba una pada en mi pobre trasero.
Mire mi teléfono y aún faltaban 15minutos para llegar a tiempo a la clase del señor Hugo (Alias mi peor pesadilla); le pague al señor del taxi y salí para correr, solo faltaban un par de calles para llegar a tiempo, si tenía suerte todo iba a salir como planeaba.
Pobre ilusa.
Estaba corriendo y no vi que justamente había un hueco lleno de barro y oh sorpresa ahí caí yo, me embarre completamente de barro mal oliente, hice un último intento y mire la hora y ya era tarde para entrar a su clase.
—¡AGH! —grite fuerte, estaba frustrada no entendida porque absolutamente todo me salía mal, estaba harta.
Si antes tenía dudas de si debería a invocar a mi ángel guardián ya no me quedaba ninguna.
Al llegar a la universidad todos me quedaban viento y ¿Cómo no? Si estaba llena de barro.
—Hey Gala —mi mejor amiga me saludo y se le borro la sonrisa en cuando vio mi estado— Pero ¿Qué te paso?
—El universo me dio una patada en el culo otra vez— le sonreí fingidamente.
Maya, mi mejor amiga me llevo junto a ella al baño para ayudarme con mi desastre.
—Ten —me extendió una muda de ropa- Ve a cambiarte ¿De casualidad Peppa pig te invito a jugar?
—Eso es un mal chiste —agarré la ropa de mala gana y me metí a un vestíbulo— Estoy harta Maya
—Pues ya te dije lo que vi por internet —la escuché decir del otro lado.
—Sí, si, esta noche invocare a mi ángel guardián.
—Que emoción —chillo— Al salir de clases pasaremos a un Oxxo a comprar el libro.
—¿Qué libro? —cuestione confundida.
—Pues la guía de invocación dha —replico con obviedad.
Salí del vestíbulo con la ropa de mi mejor amiga, ella y yo teníamos gustos o mejor dicho estilos muy diferentes, toda su ropa era corta, pero no tenía otra opción.
—Si el libro es de un Oxxo, no ceo que funcioné —dije con pesadez.
—Claro que va a funcionar tonta, solo tienes que tener fe en que si funcionara —me palmeo la espalda dándome apoyo.
—¿Que dijo el señor Hugo? —pregunte para saber si oficialmente había reprobado.
—Que si no te presentas la próxima clase llamara a tu madre.
—Agh, viejo clavo panzón.
🕯🕯🕯🕯
Al salir de la universidad Maya me acompañaba al Oxxo más cercano para comprar el libro de invocación.
—¿En verdad crees que funcione? —pregunte mientras pateaba un piedrita que casi me hizo resbalar.
—Ya te dije, solo ten fe.
—¡Bonitas piernas! —escuche a un hombre gritar y voltee por pura inercia y lo vi mirándome,
ASQUEROSO.
—¡Púdrete estúpido! —le grite de vuelta.
Odio que se crean con el derecho de gritarte cosas solo por la manera en que vistes, y lo peor es que la mayoría de ellos son viejos que ya se han casado 20 veces y tienen 100 hijos.
Llegamos al Oxxo y cuando entramos a la sección de revistas ahí estaba con el título en grande junto a una imagen de un hombre con un abdomen marcado y alas: Guía para invocar a tu ángel guardián.
—No estoy segura Maya, mira ese hombre.
—Si así luce el cielo, que Diosito me lleve ya —dijo mientras miraba al falso ángel.
Agarre la revista y me dirigí a la caja para comprarlo.
!Holanda! ¡Primer capítulo! Gracias por darle una oportunidad a esta historia.
Los quiere
Ale🕯
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Un ángel en apuros
RomanceGala es una chica que tiene muy mala suerte; Esa mala suerte la persigue las veinticuatro horas del día y los siete días de la semana. Ella intenta invocar a su ángel guardián pero termina invocado algo muy diferente. ¿Podrá Gala sobrevivir al apues...