57. Planificación

185 42 10
                                    

—Necesito que me acompañes a sacar beastman de ese edificio.

Jongho parpadea repetido, con los labios brillantes de saliva y miel, Yeosang a un lado comiendo pan de avena. El oso ladea la cabeza y frunce las cejas.

— ¿Yo? —Jongho se señala y Mingi sacude la cabeza—. ¿Por qué?

—Porque inconscientemente sabes los códigos para abrir las celdas. Eso es lo que repites todo el tiempo. Uno, tres, seis, seis, nueve, ocho, siete- Ahí lo estás haciendo.

Jongho detiene su mano y Yeosang levanta las cejas. Eso explica mucho ese tic nervioso que tiene. Verlo siempre hacer lo mismo es entre cómico y misterioso. Con eso resuelto, supone que solo le queda preocuparse por una cosa: que Mingi quiera que Jongho vaya allá.

—Aún está herido. Podrían hacerle cosas feas—queja Yeosang, tomando a Jongho del brazo—. No debe ir. Tiene que quedarse aquí.

—Todos ahí dentro necesitan ayuda tal como él. No podemos esperar a que los humanos hagan sus estupideces para impedir que lo sigan lastimando—replica Mingi acelerado—. Tenemos que hacer algo. Podemos hacerlo. —asegura con tanta fe en el tema, que es casi motivador.

No lo suficiente para Yeosang, que no quiere que Jongho se exponga a algo que le abra la herida o que lo lleve a estar encerrado en ese lugar de nuevo. Que se vaya de nuevo. Niega con la cabeza, haciendo puchero.

—Jongho se haría daño. No puede ir.

— ¿No quieres ayudar a más personas a que estén aquí? —pregunta Mingi a Yeosang que baja la mirada. Claro que le gustaría ayudar, no así que salgan heridos.

Es un dilema interno el que se crea. No quiere que nadie sea herido, pero ¿Cómo evitarlo si no es alguien poniéndose en peligro? Y con la posibilidad de ser lastimado de gravedad, si no es que peor: capturado o asesinado en el proceso. La pregunta más exacta es...

¿Por qué debe ser gente que quiero? ¿Por qué no puede ir gente que no sea de mí parvada y así generar menos dolor? Le da miedo la idea de perder a la cualquiera y solo la inquietud lo lleva a casi llorar. Jongho mira mal a Mingi.

—No voy a ir.

—pero-

—No me necesitan ahí.

—Quizá él sí—repone señalando a Yeosang y la confusión surge—. Si ya intentaron matar a Hongjoong y están viniendo hacia acá, si traen a muchos de ellos para atacarnos no podremos con todos y se lo van a llevar. Tenemos que ponerlos a salvo por su bien y por el nuestro.

—No dejaría que nada pase.

—Hay que evitar que pase. Hay que intentarlo antes. No solucionarlo cuando es un dilema. —La inquietud de Mingi es una muy válida y que si bien es una angustia que funciona para convencer a Jongho.

También es algo que lo angustia: ¿Qué pasa si vienen hasta acá y matan a Yunho?

—Atacaron dentro de ese sitio también, personas totalmente normales ¿Qué pasa con nosotros que les estamos arruinando la existencia? —repone Mingi. Es una idea paranoica, pero ¿Cuándo no ha sido bueno para la paranoia? Cuando cualquiera salido de ese lugar, no ha sido paranoico.

Es la principal razón por la que siguen vivos y bien. Lo más enteros posibles. Jongho mira hacia Yeosang, quien ulula y lo toma del brazo con fuerza.

—No vayas. No tienes fuerza. No- Jongho, nono ¡Jongho!

El oso se apura a irse, como si una retahíla de posibilidades se desenlaza en su mente. Tiene que sacarlos de ahí. Hay más osos, recuerda que olía a que había osos. Si va por ellos, conocerán la miel y si todos están aquí, Yeosang estará más seguro.

Dangerous Thing || JongSangDonde viven las historias. Descúbrelo ahora