Blue [Lumity]

Diecinueve.

Luz se despertó a la mañana siguiente con el sonido de "Twinkle twinkle little star" repitiéndose. Girándose, se frotó los ojos y examinó la habitación, viendo la figura de Amity. La chica de ojos marrones bostezó y se deslizó fuera de la cama, caminando y sentándose al lado de su novia.

Amity saltó cuando se dio cuenta de que Luz estaba despierta. Rápidamente movió sus manos lejos de las teclas y se frotó los ojos. Luz se dio cuenta de inmediato de que algo andaba mal.

—¿Qué pasa? —Luz preguntó con preocupación, buscando la mano de Amity y entrelazando sus dedos. La chica más joven miró nerviosamente.

—Tuve una pesadilla —susurró Amity, bajando su cabeza. Los ojos de Luz se abrieron.

—Pensé que se habían ido —le respondió en voz baja, alcanzando y ahuecando la mejilla de su novia.

—Yo también —Amity suspiró.

—Despiértame la próxima vez, ¿de acuerdo? —Luz pasó su pulgar por la mejilla de Amity.

Odiaba la idea de que Amity despertara de una de sus pesadillas y estuviera sola. La chica asintió suavemente, pasando rápidamente hacia adelante y apoyando la cabeza en el hombro de Luz.

—Si te hace sentir mejor, vamos a ir por tu regalo hoy —Luz susurró antes de besar la frente de Amity. La chica alta se quedó sin aliento, luchando por ponerse en pie.

—¿En este momento? —Amity preguntó con los ojos muy abiertos. Luz no pudo evitar sonreír.

—Tan pronto como estés lista —la chica de ojos marrones lentamente se puso de pie.

Amity agarró una muda de ropa y corrió al cuarto de baño para vestirse. Atontada, Luz se cambió a un suéter grueso y pantalones.

Después de que las niñas comieran su desayuno y terminaron de prepararse, Amity prácticamente arrastró a Luz a su coche. A medida que salieron a la calle, Amity comenzó a interrogar a la chica mayor.

—¿A dónde vamos? —Amity inclinó la cabeza hacia un lado, viendo como Luz giraba en una dirección que nunca había conducido antes. La chica de ojos marrones se echó a reír, sacudiendo la cabeza.

—No puedo decirte todavía, boba, eso arruinaría la sorpresa —Luz levantó una ceja. Amity puso mala cara.

—¿Puedo tener una pista? —la chica alta miró a Luz con esperanza, sólo para gemir de frustración cuando Luz negó con la cabeza.

—Paciencia —Luz se rió. Amity giró los ojos juguetonamente, conformándose apoyada contra la ventana y viendo cómo se movían más y más cerca a su destino.

La chica de cabello lila se confundió más cuando Luz se detuvo en un pequeño aparcamiento al lado de un edificio de ladrillo.

—Estamos aquí —Luz sonrió, aparcando el coche y arrastrándose fuera del asiento del conductor. La chica de ojos marrones giró a la parte trasera del coche, agarrando un soporte de plástico pequeño. Amity lo estudió confundida.

—¿Qué es esto? —preguntó Amity, colocándose al lado de Luz y apuntando al soporte.

—Ya verás —Luz se rió. Amity hizo un puchero, pero con ánimo pronto siguió a Luz al interior del edificio.

—Cierra los ojos —la chica morena instruyó. Amity levantó una ceja, pero decidió no cuestionar la petición de Luz. Tan pronto como ella se tapó los ojos con las manos, sintió una pequeña mano en la espalda, conduciéndola.

Con cuidado, ella permitió que Luz la condujera por lo que parecía ser un pasillo. Cuando dejaron de caminar, se mordió el labio.

—Abre los ojos —susurró Luz, deslizándose junto a Amity para ver su reacción.