Veintisiete.

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—Tenemos tres paradas para hacer —explicó Luz mientras caminaban. Amity escuchó con atención, curiosa por saber lo que Luz tenía preparado—. Sólo vamos a un lugar hoy —Luz continuó, entrelazando sus dedos.

Amity sonrió, asintiendo con la cabeza y saltando alegremente en frente de ellas para inspeccionar un diente de león que aparecía en la acera.

Luz se mordió el labio, preguntándose si estaba haciendo lo correcto. Era consciente de que podría ser algo aterrador para Amity, pero también estaba cansada de intentar arreglar cualquier cosa, menos el verdadero problema.

Caminaron por un tiempo, y eventualmente, Amity pidió el teléfono a Luz para llamar a Hunter y preguntar por Ghost. Ella se arrastró detrás de Luz mientras marcaba el número de Hunter, sosteniendo el teléfono en su oreja y sonriendo emocionada.

—¿Hola? —inclinó la cabeza hacia un lado. Luz la miró, viendo como la pequeña niña abría mucho los ojos y gritaba con entusiasmo—, ¡Hola Hunter!

Riendo para sí misma, Luz fue hacia atrás y agarró la mano libre de Amity para hacerla caminar. La chica balbuceaba sin cesar a Hunter sobre el funeral, incluso explicando toda su ropa en detalle.

—Golpearía tu puño, pero no puedo verte —Amity se rió. Luz puso los ojos en blanco juguetonamente, tirando de la mano de Amity para hacerla girar.

—¿Ghost está cuidando bien de ti? —Amity bromeó. Luz no podía dejar de reír. Los chistes de Amity eran tontos, pero muy lindos.

Caminaron un rato más hasta que Luz hizo un giro hacia una calle familiar. Se mordió el labio y miró a Amity, apretándole la mano y señalando el edificio de enfrente.

Los ojos de Amity se agrandaron y estuvo a punto de dejar caer el teléfono. Luz rápidamente lo agarró, diciéndole a Hunter que se tenían que ir y miró a su novia, cuyos ojos estaban explorando el gran edificio de arriba a abajo.

—Recuerdo —Amity dijo en voz baja, dirigiéndose a Luz—. Tuvimos química.

—Lo hicimos —Luz asintió, mirando a ambos lados antes de cruzar la calle—. ¿Sabes por qué estamos aquí? —Amity inclinó la cabeza hacia un lado, siguiendo de cerca a Luz.

—Todo esto era familiar para ti... antes del accidente —explicó Luz tranquilamente. Amity empezó a caminar hacia la puerta principal del edificio, pero Luz le dio un pequeño codazo para que la siguiera.

—La mejor manera de conquistar tus miedos es enfrentarse a ellos —continuó Luz. Amity asintió en silencio, acercándose y tomando el brazo de Luz mientras se acercaban a la parte trasera del edificio.

—Así que este es el primer paso —susurró Luz, dando la vuelta para encontrarse con la entrada trasera del edificio.

Amity se detuvo cuando vio a alguien más apoyado en la pared. Reconoció el pelo magenta.

—Mity —susurró Luz, llevando suavemente a Amity adelante.

La chica sonrió, saludó a Luz. Amity siguió estudiándola. Ella la conocía. Ella la reconoció.

Y entonces algo en su cabeza hizo clic. Amity se acercó más a Luz, sosteniendo su brazo.

—Te fuiste —susurró Amity, sacudiendo la cabeza y mirando a la chica, que recordó cómo Boscha—. Te fuiste.

Boscha miró a Luz antes de sacudir la cabeza.

—¿Qué quieres decir?

Amity se mordió el labio con fuerza, estaba muy nerviosa con todo lo que estaba pasando.

Blue [Lumity]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora