love me back | papufresco

02

miguel's pov;

"Otro puto día de prepa" pensé mientras me lavaba el rostro luego de cepillarme los dientes. No paraba de bostezar gracias al cansancio, pero no podía permitirme faltar a la escuela.

Tomé asiento en una esquina de mi cama para atarme las agujetas de los tennis, para así ponerme de pie, tomar mi mochila y bajar.

—Buenos días, Miriam— Esbocé una sonrisa cortés, la cual se desvaneció inmediatamente al percatarme de la presencia de mi padre en el comedor.

—¡Buenos días!— Correspondió Miriam, lo que llamó la atención de mi papá; quien, como siempre, estaba atendiendo una llamada.

—Hijo..— Lo ultimo que necesitaba ahora mismo era verle, no pude evitar fruncir el ceño al siquiera verle dirigiéndose a mí. Justo antes de que pudiera responder algo, Miriam regresó de la cocina para darme mi almuerzo.

Agradecí esto y me dispuse a salir de la casa, lo que para mi suerte fue impedido por mi padre ordenándome que regresara.

—¿Dime?— Solté en un tono golpeado; mirándole lo más neutral que mi tolerancia me permitía.

—Súbete al auto, voy a llevarte— Palabras que no escuchaba desde que era un niño, era increíble.

A pesar de cuanto me incomodaban sus intentos por ser un "padre" no podía ser tan grosero como para rechazarlo, así que sí, ahora mismo me encontraba en el asiento de copiloto de su preciado Mercedes.

¿Qué intentaba con esto?

—¿Cómo vas en la escuela? ¿Ya tienes novia?— La incomodidad y tension en mi cuerpo iban en incremento, su presunto interés en mi vida personal empeoraba todo.

—Me va bien, y no.— Aquella pregunta me dejó pensando en los 3 años que llevaba estudiando en la misma escuela y el hecho de que nunca había llegado a sentir un interés genuino en alguna; simplemente se me hacían, ¿lindas?

Soy demasiado god para una relación.

—¿No? Sería bueno que tuvieras una— Arqueé una ceja al escucharle, ¿a qué se refería con eso? no es que sea raro que un padre tenga interés en la vida sentimental de sus hijos, pero... mi padre era casi como un extraño para mí.

—Supongo— Desvíe la mirada hacia el camino, notando que estábamos a media cuadra de la entrada de la escuela. No quería que me vieran saliendo de un auto "lujoso" era vergonzoso, y mucho peor, no quería que vieran a mi padre.

Existe cada rarita con gusto hacía los señores.

Sentí nauseas al siquiera imaginar que a alguien le resultara atractivo mi padre, sabiendo cómo podían ser algunas chicas. Suspiré y tomé el valor de hablar.

—Puedes dejarme aquí, no es necesario que me acompañes a la entrada— Disminuyó la velocidad, lo que me hizo pensar que estaría de acuerdo con eso.

Qué equivocado.

—Tengo que pasar a tu escuela, me hablaron por los planes de su graduación.

Mierda, era cierto. Estaba en mi ultimo semestre de bachillerato.

Me quedé en silencio únicamente, quería evitarme un regaño de su parte por llevarle tanto la contraria. Vi como poco a poco disminuía mas la velocidad hasta aparcarse no muy lejos de la entrada y salí rápidamente, quisiera poder haberlo dejado atrás pero sabría lo que me esperaría si lo hacía.

Sentía miradas a nuestro alrededor, estaba ahogándome de impotencia y arrepentimiento. Supuse que sería por nuestro parentesco, pero no, por lo que me han dicho salí a mi madre.