love me back | papufresco

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luis pov;

—¿Te peleaste con Miguel?— Preguntó Eliza mientras se sentaba en la orilla de mi cama; en donde yo estaba recostado tratando de reflexionar acerca de mi relación con el tan mencionado.

Toda la semana había estado sido cuestionado por esto mismo, ni siquiera conseguía concentrarme en la escuela por estar pendiente a lo que Miguel hiciera.

Según mi madre, tenía unas ojeras espantosas, pero simplemente no conseguía dormir sabiendo no estaba bien con él.

Parece que me acostumbre muy rápido a él; su "Creo que vamos muy rápido." llegó a mi mente ese recuerdo al pensar en esto.

—¿Por qué preguntas?— Contesté sin despegar mi rostro de la almohada, sabía el tipo mirada que tenía Liz ahora mismo.

—Tú cuarto está hecho un chiquero, llevas reproduciendo la misma canción todo el día y me mandó mamá a quitarte esas bolsas de los ojos.

Okay, tenía un punto.

—¿Por qué pensarías que es por Miguel?— No tenía ni siquiera ganas de citar mis momazos.

—Me preguntó por ti hace días— ¿Cómo?

—¿¡Sí!?— Me levanté inmediatamente, tomándola de los hombros como un lunático. —¿Qué te dijo?

—Ay, ¡suéltame!— Se paró de la cama y se alejó mientras yo me quedaba en silencio para que comenzara a hablar. —Ash, bueno. Me mandó dm preguntándome cómo estabas, yo le dije que estabas más feo de lo normal y él me preguntó por qué y ya no supe que responder.

—No mames, Eliza— Me estaba carcajeando a la vez que sentía mis ojos picar por las ganas de llorar. Eliza me miró extrañada y se fue, dejándome solo nuevamente.

Parecía que estaba enloqueciendo, amaba a Miguel pero hacerlo estaba asustándolo. Se sentía como con todas mis amistades de otras escuelas, a todas terminaba agobiándolas por mi forma de ser.

Me levanté de mi cama para encender la luz de mi habitación y ponerme a ordenar todas las cosas tiradas en mi escritorio, al igual que llevar a la basura todas las envolturas de comida que tenía regadas por el suelo.

No podía dejar pensar en hecho de que Miguel siguiera interesado por mí a pesar de lo que mis vagos recuerdos lograban conservar de lo que sucedió esa noche, no sería la primera vez que me rechazaban pero... ¿por qué me preocupaba tanto?

Estaba molesto porque no entendía qué pudo cambiar en su decisión de la noche a la mañana.

Le gusto, pero no está listo para algo más.

¿Por qué me es tan complicado entenderlo solo como eso y no tratar de buscarle una explicación?

Mis audífonos reproducían One of Your Girls de Troye Sivan mientras trataba de distraerme barriendo el piso de mi habitación. Llorar con una escoba en las manos se sentía igual a la vez que Facebook me silenció por sacarle la IP al que le dió me divierte a la foto de mi gato.

—Debí subirlo al Blog del N#@*% cuando tuve oportunidad— Murmuré para mí mismo mientras sentía las lágrimas cayendo al piso.

"Give me a call if you ever get desperate, i'll be like one of your girls" Sonó justo en el momento en que mi teléfono vibró y la pantalla se encendió; dejando ver la notificación de los mensajes entrantes por parte de Miguel.

La escoba se me cayó de las manos al momento en que saqué mi teléfono de mi bolsillo para contestar, mi alma pareció volver a ser mi cuerpo al leer su propuesta. Claramente acepté, a pesar de seguir sintiéndome algo resentido.