Capítulo 1

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Catherine Gautier:

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Catherine Gautier:

Ya empezaríamos el último año en Hogwarts, faltaban dos dias, dos dias para volver a ver a mis amigos y a Tom, estaba feliz por verlos. Baje las escaleras de mi casa y vi a mi madre poniendo la mesa para el desayuno. Al verme sonrió y dijo:

—Buen día, hija—dio una pausa—. ¿Cómo amaneciste?

—Bien, ¿y Matthew?—pregunté al no ver por la casa a mi hermano.

—En el jardín, debes ir a verlo.

Asenti y fui en busca del castaño, sentí que alguien me tomó de mi hombro, me di la vuelta y vi a mi hermano.

—Buen día, Katie—dijo pasando su brazo por mi hombro

—Buenos días, Matt—sonreí mientras él dejaba un beso en mi frente.

—Te llegó una carta de Tom, pero la agarre antes, si que es raro—río por lo bajo.

—No agarres mis cosas, tonto—le di un golpe leve en el brazo y el rio.

—Toma tu carta, enana—dijo dándome una carta.

Agarre la carta y entre a la casa, mientras escuchaba la risa de mi hermano, subí las escaleras hasta llegar a mi cuarto y empecé a leer la carta.

                        
"Catherine:

Ya tengo todo para buscar sobre lo que te dije, termina el curso y buscaré los objetos. Antes de olvidarme, espero estes bien.

La casa de Avery es grande pero estamos completamente solos, sus padres salieron de viaje por lo que me mencionó.
                            Tom Riddle."

Tom no es tan expresivo, se nota desde lejos eso.

Fui a mi escritorio y agarre mi pluma para empezar a escribir una carta en respuesta.

Cuando termine de escribirla saqué a mi lechuza Cyra de su jaula para darle la carta y abrí la ventana y esta salió volando desapareciendo en busca de Tom.

—¡A desayunar!—escuché el grito de mi madre en la planta baja.

Baje las escaleras con rapidez y me senté en la mesa que quedaba libre, Matthew y mi madre ya estaban sentados.

—¿No sabes nada de él?—pregunto Matthew.

—Solo que disfruta con su nueva amante, pero no quiero hablar de él, Matthew, mejor cuéntenme de cómo son sus clases en Hogwarts—dijo mi madre mientras le daba un sorbo a su té.

—Como siempre, buenas—contesto Matthew.

—¿Les gusta pociones? Yo era la mejor de la clase, una clase realmente buena y te deja muchas enseñanzas—dijo sonriente.

—A mi me va bien, a Matthew...

—Bien—dijo Matthew rápidamente.

—Mejor dicho mal—rei.

—Admito que no a todos les parece fácil hacer una poción,  en mis primeros años en Hogwarts apenas sabía hacer la poción curadora de forúnculos—rio.

—Esa era la más fácil para mi—dije mientras mordía un croissant.

—Era por que te ayudo Tom—se quejó Matthew.

—Claro que no.

El desayuno transcurrió normalmente, entre risas y los regaños de mi madre hacia Matthew por molestarme. Estaba en el balcón viendo como el sol llegaba a las letras del libro que leía. Mi padre había ido al mundo muggle y me compro un libro llamado "Orgullo y Prejuicio" no lo niego, es buen libro solo que me molesta la forma que trata disculparse conmigo. Comprándome.

—Hija, tienes una visita—dijo mi madre entrando a mi habitación.

—Ya voy—le dije.

Baje las escaleras con rapidez y vi a Lisa sentada en el sofá de mi casa,  al verme ella sonrió y se puso de pie preparándose para un gran abrazo.

—¿Cómo estás?—preguntó Lisa.

—Bien, Lizzy.

—Me alegro, te quise venir a ver, te extrañaba mucho.

—Yo igual.

—Por cierto, iré a la casa de Avery, ¿quieres ir? Ya que ahí esta Tom.

—Claro, le diré a mi madre y te acompaño.

—Bien.

Fui a la cocina donde mi madre preparaba una tarta, ella al verme sonrió y se limpió las manos.

—¿Que sucede?—pregunto sonriente.

—Iré a la casa de Avery con Lizzy, allí está Tom y me invito.

—Perfecto, cuídate mucho, te quiero.

—Yo igual, adiós.

—¿Lista?—preguntó Lisa.

—Claro—sonrei.

Salimos de mi casa y subí con cuidado al carruaje, iba lento pero al mismo tiempo rápido, la casa de Avery por suerte cerca de aquí,  digamos que,  algo lejos pero no tan cerca tampoco.

—Que nervios empezar el séptimo año, no quiero terminar como una vieja solterona con llena de gatos—dijo Lisa.

—Créeme que soltera no estarás, Lizzy.—reí.

—¿Cómo estás tan segura? ¿Qué pasa si Cristhoper decide dejarme?

—Si sucede se perderá a una mujer maravillosa.

—Si tengo hijos tú serás la madrina—dijo dándome un abrazo.

—Lo mismo, si lo tengo tú lo serás.

—imagínate a un mini Tom corriendo por los jardines de tu casa.

—Por merlin, apenas empezamos el último año y ya quieres que tenga un hijo con Tom, aunque siendo sincera si quiero, pero una niña, la llamaría Elizabeth o Alessia.

—Lindo, aunque un niño tampoco te vendría mal, un niño igual a Tom pero con tus ojos.

—Tienes razón.

Seguimos hablando hasta que el carruaje se detuvo, llegamos a la casa de Avery, bajamos con cuidado y tocamos la puerta, una elfina nos abrió la puerta y nos dejó pasar muy amablemente.

—¿Sabes dónde está Cristhoper?—pregunto Lisa poniéndose a su altura.

—Claro, señorita Graham, está en el comedor jugando ajedrez mágico con el Señor Riddle.

Lizzy asintió y nos dirigimos con cuidado al comedor, hasta que vi a dos cabelleras demasiado conocidas para mi, Tom y Cristhoper jugando el ajedrez mágico.

—¡Lizzy!—dijo Avery poniéndose de pie—Y veo que trajiste a Katie.

—¿Donde?—pregunto Tom.

—Atrás tuyo—dijo Lisa antes de darle un beso a Avery.

Tom se puso de pie y me agarro de la cintura para luego darme un beso corto en los labios el cual fue correspondido.

—¿Cómo estas?—preguntó luego de darme el beso.

—Mejor—sonreí.

—Quiero un sobrino, más les vale que me lo den—dijo Lisa dándonos una mirada a los dos.

—¿Que demonios dices, Graham?—pregunto Tom confuso.

—No le hagas caso, solo quiere molestarte—reí.

Tom asintió y me ayudó a sentarme en una silla del comedor, mientras Avery y él siguieron con el ajedrez mágico y la mano de Tom en mi muslo.

Tolerate It (Tom Riddle)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora