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"Estoy atrapada entre tratar de de alejarme o correr hacia ti"
Catherine Riddle:
—Luego de esto, iré a tu despacho—dije mientras dejaba la taza de té en la mesa.
—¿Para?
—Arreglar un poco, Pinky me ayudará—dije poniéndome de pie.
El asintio, me puse de pie mientras me dirigía a aquel despacho, la elfina venia tras mio.
—Pinky, ¿traes las cajas?—pregunte entrando al despacho.
—Así mismo—sonrió la elfina.
—Bien, ve guardando esto y esto—dije mientras le pasaba unos cuantos libros.
Mientras caminaba para agarrar otro libro tropecé con algo que no le di tanta importancia.
—Debe tener cuidado, ama Catherine, Pinky estaría muy mal si la pasase algo—dijo Pinky.
—Lo se...—sonrei.
—Allí están las plumas, podemos renovarlas si usted desea—dijo Pinky.
—Si, tienes razon—sonrei—. Te las pasare.
Volví a tropezar, frunci el ceño y me agaché con delicadeza para ver que era aquel objeto. Agarre el objeto con cuidado para examinarlo, era un pendiente.
Claramente no era mío, a mi no me gustan los rubíes.
—¿Señora? ¿Que es eso?
—Un pendiente...no es mío—murmure.
—Pinky quiere ver el pendiente, puede ser de la señora Selwyn.
—Deja todo como estaba...iré a mi habitación, luego seguiré arreglando esto...—dije en un hilo de voz mientras salía del despacho.
Subí directamente a las escaleras para dirigirme al cuarto de Charlotte, no estaba ella aquí así que me deje caer en la cama mientras incontables lágrimas salían de mis ojos.
En la mesa de luz había una foto de nosotras dos de pequeñas y nuestras madres, agarre el retrato mientras veía aquel retrato.
—Madre...—murmure acariciando su rostro en la foto.
No quería sufrir más por el, quería divorciarme...pero no había manera.
