Modern AU.
—Tengo algo que contarte.
—¿Hmm?
—¿Quién carajo eres y qué haces con el teléfono de Nasse?
—Avyson, son las 3 de la mañana. ¿Por qué me llamas? —la voz ronca hablo y ella sintió su mundo caerse.
Alejo el celular de su oreja, en la pantalla resplandecía el nombre de Aemond Targaryen.
—¿Avyson? ¿Estás bien? ¿Necesitas que vaya por ti?
—Dioses, lo siento. me equivoqué de número, lamento haber interrumpido su noche señor Targaryen.
—No te produces Avyson, no interrumpes nada.
—Yo... no quise llamarlo, no quiero que su esposa piense que soy una ramera yo...
—Aemond la cortó, dejando salir una risa muy ronca. —¿Qué esposa Avyson? ¿De qué hablas?
—Creí que había interrumpido su noche con su esposa, señor Targaryen y no fue mi intención, deseaba llamar a mi amiga, no a usted.
—¿Entonces no deseabas hablar conmigo?
—No. Digo sí, no, no lo deseaba, no quiero que usted crea que soy una ramera, pero deseaba hablar con mi mejor amiga.
—Entiendo, creí que estabas ebria en un bar y necesitabas que fuese por ti.
—No se preocupe señor Targaryen, es poco probable que lo llamase.
—¿Por qué no?
—Es mi jefe y no desearía llamarlo y molestarlo.
—Avyson, me importas, no me importa la hora que sea, no deseo que estés mal. ¿No deseabas hablar conmigo?
—No. ¡Quiero decir! Sí ¡No!
—Aemond soltó otra ronca risa. —hmm, olvidaré lo sucedido sólo sí aceptas ir a cenar conmigo.
—¿Seguro?
—Sí.
Dudó en aceptar, no iba a negar que lo había stalkeado múltiples veces, era muy serio y perseguido, le costaba trabajo creer que no estuviese implicado amorosamente con nadie.
—¿Cuándo?
—¿Cuándo puedes? Ya sé. Tienes libre mañana.
—Tengo que trabajar.
—No has entendido, tienes libre mañana, prepárate para la cena. Duerme bien, encanto.
El pitido en su oído la había hecho volver a la realidad, había aceptado y no la invitación de Aemond Targaryen.
Había aceptado salir con su jefe, él cuál le llevaba al menos unos años, sabia que no era un anciano, tampoco era un adolescente, intermedio.
Esa mañana, se arregló desde que se levantó, intentó no verse nerviosa, verse normal, tranquila, pero no desinteresada.
¿Y sí Aemond planeaba despedirla y por ello la había citado afuera? Aunque Aemond no se encargaba de eso, la que lo hacía Alys Rivers, hija de Larys Strong.
¿Por qué la había invitado?
Llegó la noche y con ella, la cena con Aemond, escuchó un claxón y su celular se encendió con una notificación.
Estoy afuera.
Trago y se encaminó hacía afuera, Aemond estaba mirando despreocupadamente su apartamento, hasta que sus ojos chocaron, le dio una sonrisa que no supo interpretar, cuando estuvo al frente, abrió la puerta del auto, para después meterse él y encaminarse al restaurante más caro de toda la ciudad, al llegar, nuevamente abrió la puerta y los flashes en su cara la hicieron cegarse por un momento.
