Segunda parte del one shot anterior.
—Aemond. ¿Qué haces aquí?
—¿No puedo visitar a mis sobrinos? —Aemond rió cuando Jaehaera golpeó a Jaehaerys en la cabeza con un caballo de madera.
—No, no puedes. Vete inmediatamente...
—¿O qué? ¿Llamarás a tu esposo? No seas tonta Aérea, Aegon no puede sentarse en el Trono sin tener una copa de vino primero. ¿Realmente crees qué vendría a tu rescate? Aegon es débil.
—No discuto la debilidad de Aegon, y no lo necesito para defenderme.
—Eres increíble sobrina. ¿Sabes? Gracias a ti estoy condenado a una zorra Baratheon.
—Creí que estarías feliz de tener una esposa para dormir todas las noches. Llevenlos a la guardería. —ordenó la menor y las nodrizas tomaron a los gemelos de las manos, sacándolos de allí.
—No me disgusta la idea de tener un coño donde enterrarme todas las noches. Pero no era mi coño deseado.
—Siempre puedes ir a la Calle de Seda. Hasta donde sé, ese es el hogar de ustedes.
—¿Has oído del bastardo de Aegon? ¿Gaemon?
—¿El niño en Flea Bottom? Muchos dicen que es tuyo, o de ambos. Lo curioso es que odias compartir.
—He sido condenado a compartir y competir con Aegon. Yo debí de ser el mayor...
—Pero eres el segundo hijo que no hereda nada.
—Lucerys es un bastardo con suerte.
—Lo dejaste casi muerto.
—Casi. No entiendo como un segundo hijo va a poseer Driftmark, su Trono será en High Tide.
—¿Celos?
—¿De un bastardo?
—Un segundo hijo, heredero de todo. Un Trono, un apellido.
—Con dos padres. —Aemond rió.
—Que los amaron más de lo que alguna vez mi abuelo los pudo amar a ustedes.
—Aegon no es tan diferente a Viserys, sobrina.
—Mi abuelo no engendraba bastardos. Ustedes dicen que mi madre es la reina de bastardos. Coño engreído de Dragonstone. ¿Aegon qué es? Al menos los "bastardos" —hizo comillas con sus dedos. —fueron legitimizados.
—Eres tan tonta. —sonrió acariciando el pómulo de la menor. —pero más tonta mi madre al casarte con Aegon en vez de mi.
—¿Qué estas diciendo?
—Te respetaría y me habría casado contigo para prevalecer la sangre.
—Aegon también lo hizo.
—Sí pero no te respeta, ni te complace, yo podría hacer eso y más.
—¿Qué quieres, Aemond?
—Hmm, acabo de ridiculizar a Aegon en el Consejo, el idiota no comprendía mis palabras en alto valyrio. Habrá una Guerra.
—Ya la hay.
—Habrá otra, te aconsejo, mi reina, que tomes a tu dragón y a los niños y marches lejos de King's y Dragonstone.
—Jamás abandonaría a mi familia.
—Tu familia ya lo hizo, casándote con Aegon.
—Mi abuelo lo proclamó, no podían negarse a la voluntad del rey.
